lunes, 30 de noviembre de 2015

Medios de comunicación: En su momento salimos del fuego para caer directamente en las brasas, donde seguimos (508)

Sede de Mediapro en el Centre Audiovisual Imagina de Barcelona, ubicado en la Av. de la Diagonal. Imagen: Wikipedia.

Prisa ha representado lo peor del felipato a lo largo de la Transición y de la calamitosa etapa democrática protagonizada por la izquierda, tan corrupta en lo material como en lo ideológico. También Prisa ha supuesto, al menos inicialmente, el respaldo al lado oscuro del arbitrario régimen zapaterino, al que catapultó al poder mediante unos “terroristas suicidas” y otras falsedades —incubadas “casualmente” en el mismo avispero—, que se propalaron siempre en forma de sucias consignas con las que en los momentos clave, desde 2002 en adelante, no dejó de arengarse a la manifestación callejera y en contra del período de reflexión que fija la ley.

Por eso Prisa, dicho a modo de resumen de apremio, pasará a la historia de la infamia y de los medios de comunicación como la madriguera de cuanta mentira periodística y fervor interesado —con el añadido cínico de ciertas ínfulas éticas y libro de estilo— han narcotizado a España en la presente generación y la han embadurnado de un izquierdismo de garrafa que no soporta el más leve análisis histórico, intelectual o decoroso.

Delara Darabi, un nuevo crimen del islamismo que debe recordarse (507)

El 1 de mayo de 2009 fue llevada a la horca y ejecutada (lo correcto sería escribir asesinada) la joven Delara Darabi, artista iraní sobre la que todo apuntaba a su inocencia.  

Cuando el conocimiento está al alcance de todo el mundo, asunto a lo que Internet ha contribuido en no poca medida, el gran mal de nuestro tiempo sigue siendo la dificultad que aún tienen algunas ideologías para evolucionar y embriagarse, valga la expresión, del respeto a los derechos humanos. Comenzando por el principal de esos derechos, el respeto a la vida. Hablo de ideología en el sentido político, por supuesto, pero también en el religioso o doctrinario, que tan a menudo se entrelaza con lo mundano cuando el progreso ético ha sido casi inexistente.

El caso más paradigmático de una religión politizada hasta la saciedad, que en absoluto respeta los derechos humanos y que desde sus inicios demostró un desprecio brutal hacia la vida de las personas, vendría representado hoy por el islamismo, una especie de religión —por llamarla de algún modo— que acoge en su seno a más de 1.200 millones de personas incapaces de sacar el pie del lodo, tal es el grado de sometimiento en el que se encuentran esos seres humanos.

domingo, 29 de noviembre de 2015

Los aledaños del Gobierno a guantazo limpio (506)

José Luis Rodríguez Zapatero nunca fue un bobo solemne, se limitaba a simular el gesto para que sus enemigos lo tomaran como tal y se confiaran. Eso sí, fue más malo que la carne de pescuezo y no le importó, como es posible leer en el artículo, ir escabechando a unos cuanto colegas de partido para evitar que alguno acabase por sublevarse y echarlo a él. Pero de bobo nada, en todo caso hipócrita hasta en el gesto.

Próximas las elecciones generales del 20D y como aviso a navegantes, aporto hoy otro episodio que narra cómo fue el último socialismo con mando en plaza al que los españoles logramos sobrevivir, el de Rodríguez Zapatero, también conocido como "El Eterno adolescente" o ZP. De entrada conviene aclarar que ZP, mediante un pacto cargado de nocturnidad y felonía establecido con Artur Mas, fue quien desencadenó la deriva separatista que aún se mantiene en el alero catalán. Así, pues, digamos que el conocimiento del pasado nos ayuda a entender el presente y por lo tanto a no confiar ni un milímetro en ese socialismo que siempre acaba por empobrecernos, dejarnos sin trabajo y con España hecha jirones.

Artículo
Zapatero nunca ha demostrado autoridad alguna para controlar a su propio partido. Ha carecido del poder de convicción que todo líder auténtico debe poseer y en consecuencia desde el primer momento optó por la represalia para mantener quietos a los suyos. Así sucedió con el vasco Redondo Terreros, el valenciano Lerma, el catalán Maragall, el madrileño Leguina, el extremeño Rodríguez Ibarra, el gallego Vázquez…, personajes que fueron apartados más o menos bruscamente para evitar que alguno de ellos le hiciese sombra. Personajes entre los que igualmente podría incluirse al manchego José Bono, al que no dudó en nombrar ministro y luego presidente de las Cortes para desubicarle de su feudo.

sábado, 28 de noviembre de 2015

Instituciones fuera de la ley (505)

Han sido numerosos los actos de homenaje a los terroristas de Terra Lliure, casi siempre a cargo de las Juventudes de ERC e invariablemente cargados de impunidad. En la pancarta de estos descerebrados se indica: "Ni olvido", "Ni Perdón". Es decir, estos tipos envilecidos nos muestran que no piensan olvidar la fechoría de uno de sus fundadores, cuando fue pillado con las manos en la masa mientras intentaba practicar un atraco junto a otros "colegas" ideológicos. Fue herido en un enfrentamiento contra las fuerzas del orden y abandonado por sus valeroso cómplices de Terra Lliure, lo que determinó su fallecimiento al no ser atendido a tiempo en un hospital. Me pregunto si ese tipo de canallada merece un homenaje continuado donde siempre se apele al recuerdo y el odio.

Hace muchos años que la ley no se respeta en Cataluña, pero no solo sucede en materia lingüística, sino en otras cuestiones relacionadas sobre todo y paradójicamente con la Justicia. El término queda anotado así, en mayúscula, para que se advierta que las irregularidades aluden a todos sus estamentos superiores: jueces, fiscales, secretarios y abogados. A continuación refresco la memoria de los lectores de este blog con uno, simplemente uno, de esos casos sangrantes en el que los delincuentes se fueron de rositas:

Artículo
Asegura el clásico que “todos somos iguales ante la ley, pero no ante los encargados de aplicarla”. Lo demostraría así un acto de apología y exaltación terrorista tolerado por la Fiscalía en Barcelona, a la que se le pidió que actuase para impedirlo, sin que hiciera nada. De modo que pudo consumarse un homenaje al terrorista catalán Martí Marcó, cofundador de Terra Lliure —banda de delincuentes que cometió más de 200 atentados— , el cual fue pillado in fraganti por la Policía cuando, junto a otros dos compinches, se disponía a asaltar un furgón blindado. Posteriormente, malherido en la refriega, el terrorista fue abandonado por sus “valerosos” cómplices en el interior del coche utilizado, con las puertas abiertas y en una calle de Barcelona.

viernes, 27 de noviembre de 2015

¿El socialismo real es libertad? No, es opresión y mortandad (504)

Acceso al cementerio polaco de Katyn, donde reposan los cadáveres de 22.000 civiles y militares masacrados por el comunismo soviético tras la invasión de Polonia. La masacre se produjo con la autorización de Stalin y otros cuatro miembros del Politburó, a instancias de Beria, el jefe de la NKVD (policía secreta soviética). Cayeron miles de oficiales del ejército polaco, policías, intelectuales y otros civiles, todos ellos fusilados por el simple hecho de ser polacos, lo que constituye un verdadero acto de genocidio muy alejado de quienes siempre, de boca para afuera, se han declarado partidarios de la libertad. Por cierto, me gustaría saber qué tienen que decir los comunistas Alberto Garzón y Pablo Iglesias de todo esto.  Imagen: Wikipedia.

El libro negro del comunismo, obra aparecida en Francia a finales de los 90, atribuye 100 millones de muertos —asesinados— a esa ideología perversa e inhumana que durante el siglo XX “erigió el crimen en masa como forma de gobierno”. Desde entonces, a medida que van abriéndose los archivos de lo que fue ese verdadero imperio del terror denominado URSS, no han dejado de surgir nuevas evidencias que avalan o refrendan tan espantosa cifra de cadáveres.

Parte de la sinopsis de El libro negro del comunismo dice así: “¿Cómo [es posible que] un ideal de emancipación y de fraternidad universal pudo transformarse, un día después de la Revolución de Octubre de 1917, en una doctrina del poder absoluto del Estado, que practicó la discriminación sistemática de grupos sociales y de naciones enteras y recurrió a las deportaciones en masa y, muy frecuentemente, a las masacres?”.

jueves, 26 de noviembre de 2015

Me declaro incompatible con el Estado de las Autonomías (503)

Es un buen momento para recordar que el patriotismo es amor a lo propio, a diferencia del nacionalismo (el que sea), que igualmente ama lo propio pero no deja de sentir odio a lo ajeno e incluso precisa señalar un enemigo. Por eso, para el que simplemente se sienta patriota de España, sin odiar nada ni a nadie, basta con sentir la ilusión del jovencito que exhibe su bufanda. 

Lo más razonable es situarse a favor de determinadas causas y a ser posible mostrar siempre cierto juego limpio, es decir, ser un aficionado o simpatizante sin llegar al grado de la radicalidad. Pero eso solamente es en teoría, porque a la hora de sentir nuestros colores, sean de un equipo de fútbol, un partido político o, en la actualidad, opinar sobre una actuación concreta en un territorio marcado por la violencia, como sería el mal denominado conflicto de Gaza, lo habitual es decantarse a favor de una de las partes hasta adquirir uno el grado de forofo. Ojo, y digo mal denominado porque ese conflicto probablemente no existiría sin que previamente el sur de Israel se hubiese visto envuelto en ataques continuados.

No, el artículo de hoy no trata sobre Gaza. Sigamos.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

Que conste que Aznar y otros alertaron a Obama (502)

No parece que Barack Obama haya prestado demasiados oídos a los mensajes de advertencia de varios expresidentes iberoamericanos sobre el auge de los populismos en Sudamérica. Al presidente USA se le avisó al iniciar su primer mandato y entonces los populismos apenas despuntaban. Ahora, casi ocho años más tarde, ha quedado claro que Obama no solamente no ha hecho nada para evitar las dictaduras en Sudamérica, que han alcanzado ya su cenit, sino que como buen progre admirado por la izquierda en España ha preferido darle un certificado de buena conducta a los hermanos Castro.

Decía Hemingway: “La sabiduría de los ancianos es un error. No se vuelven más sabios, sino más prudentes”. O lo que es lo mismo, el hombre cauto usa el hoy para prevenir el mañana. Y es que la imprudencia, ya se sabe, en no pocas ocasiones suele preceder a la calamidad, muy especialmente si el gobernante tiende a suponer y poner en práctica lo que afirmaba Jaime Balmes: “El pueblo comprende antes el lenguaje de las pasiones que el de la razón”.

Tal es la causa de que los populismos o socialismos apelen incesantemente a la práctica de determinadas pasiones, lo que no es algo distinto a tratar de imbuir una situación eufórica, de arrebato emocional, que mantenga ensimismado a ese mismo pueblo y como absorto ante la consigna reiterada. Una consigna que desde luego equivaldría al “todo vale” si hubiese que describirla en lenguaje contemporáneo. Siempre que ese “todo” convenga para conservar la clientela de los populistas-socialistas y de paso desacreditar la sensatez  de la derecha.

martes, 24 de noviembre de 2015

Los fascioseparatistas de ERC, según Camacho (501)

Acto de homenaje de las JERC a Terra Lliure, una banda terrorista que cometió varios asesinatos y numerosos atentados. Al pie de la imagen, una serie de banderas de partidos nacionalistas radicales y similares, junto a las de varios estados con dictaduras comunistas. En pocas palabras: La crem de la crem de la escoria política.

Ignacio Camacho, igual que yo —o por mejor decir: yo, tratando de expresarme igual que él (pongamos delante al maestro)—, siente una especial repulsión hacia Esquerra Republicana de Catalunya, ese conglomerado fascioseparatista (fascista+separatista) y filoterrorista que un calamitoso día asaltó el poder de la Generalidad catalana, con intención de quedarse y sin contar con mérito alguno ni votos suficientes para ello. Lo hizo, sucesivamente, con el exclusivo apoyo de dos tipos a cual más despreciable políticamente hablando: Los socialistas Maragall y Montilla, ambos deseosos de ascender a la máxima poltrona del “Palau” y ambos, por lo tanto, dispuestos a pagarle a los palurdos radicales de ERC el precio que pidiesen. ¡Y vaya si lo han ido cobrando!

La sabiduría de Antonio Mingote (500)

La genialidad definiría la trayectoria del gran Mingote, catalán de Sitges, de padre aragonés, madre catalana y afincado en Madrid durante muchos años, ciudad donde más a gusto se sentía, según confesó en alguna ocasión, y que eligió para morir. No olvidemos que es imposible decidir el lugar donde a uno lo nacen pero si puede escogerse donde se desea morir y ser enterrado. Y ese, el lugar escogido para la muerte y la sepultura, es el que en verdad acaba dándonos el paisanaje sentimental. 

Decía Aristóteles: “Hay la misma diferencia entre un sabio y un ignorante que entre un hombre vivo y un cadáver”. Lo que ocurre es que es preciso vivir muchos años, observando nuestro entorno con no poco espíritu crítico, y a poder ser distinguiendo lo esencial de lo fugaz, la propaganda política y el adoctrinamiento ideológico de la vileza que conllevan. Quizá, solo quizá, así fuese posible que la sabiduría apenas le rozara a uno. No es el caso de Mingote, nuestro sabio y acreditado humorista-poeta, cuya obra, de gran viveza intelectual, demuestra que la sabiduría le impactó de lleno hace muchos, muchos años.

lunes, 23 de noviembre de 2015

Esperanza Aguirre siempre lo ha entendido: Se trata de plantar cara a la izquierda (499)

Esperanza Aguirre: Simplemente la mejor.

A la izquierda es imposible pararle los pies con buenas palabras o con apelaciones al cumplimiento de la ley, lo mismo que ocurre con el nacional-separatismo. Un historial delictivo de más de 100 años de violencia y opresión en los países donde la izquierda ha dominado o un balance de más de 100 millones de asesinatos e incontables torturas a su cargo, como cualquiera que no fuese un sectario reconocería, acreditan de sobras lo expresado en el primer párrafo. Desde siempre, la izquierda ha buscado la unanimidad a través de la violencia y la coacción, sin percatarse una y otra vez que tal método supone una labor baldía —frente al deseo de libertad y orden democrático real del ser humano— y que lo máximo que consigue es despertar a la derecha no acomplejada, que acaba por aunar en sus filas a la mayor parte de la población y acaba "apalizando" a las izquierdas. Tal situación es la que se dio en la Guerra Civil, cuando los insensatos izquierdistas del Frente Popular, que incluía a los anarquistas aunque no presentaran candidaturas, llegaron a creerse los muy anormales que debería respetárseles el “derecho” a la violencia.

Lo que ocurre es que la derecha suele tardar demasiado en reaccionar, ofreciendo a menudo la otra mejilla; pero cuando reacciona, cargada de razones como consecuencia de las iniquidades recibidas, suele ser inmisericorde y acaba por mandar a la izquierda al estercolero. Y es a eso a lo que no hay que llegar en ningún caso. Precisamente para evitar situaciones de gran violencia, que es adonde se desemboca casi siempre, lo más sensato es plantar cara a la izquierda tan pronto se pueda y dejarle ver que no va a salirle gratis el intento de imponer sus ideas a través de unos métodos que a menudo desbordan las normas. Es decir, la derecha debe comenzar por desenmascarar a la izquierda y además debe hacerlo de forma clara, en la calle, en los medios y, sobre todo, en el Parlamento. Por supuesto, para tomar una decisión así, como es la de enfrentarse a la izquierda con algunas de sus propias armas, es preciso que la derecha cuente con un líder que además de carisma posea valor y esté convencido de que el apaciguamiento es una inutilidad que conduce a lo peor. No es el caso de Rajoy, evidentemente, al que considero más bien partidario de templar gaitas.

domingo, 22 de noviembre de 2015

¿Qué encierra la alabanza de tu mayor enemigo? (498)

El equilibrio adecuado entre dos naciones vecinas suele darse cuando sus mandatarios poseen la dignidad y ética necesarias, por eso cuesta creer que estos dos se llevasen tan bien sin que uno le limpiase las botas al otro. Se admiten apuestas acerca de quién desempeñó el papel de limpiabotas.

Qué pensaría usted si de repente fuese ensalzado por su mayor enemigo. Digo bien, enemigo. Pongamos un ejemplo: Que deberíamos suponer si determinada historiografía afirmase que el cartaginés Anibal en ningún momento dejó de alabar a Roma y en particular a su general Escipión. Como poco debería sospecharse que hay gato encerrado detrás de los halagos. O bien, que quizá de un modo atolondrado uno no se está preocupando de poner los medios para defender lo propio. Porque no olvidemos que la alabanza suele ser la práctica de los tiranos destinada a confiar al enemigo, digo bien, enemigo, y así arrebatarle con mayor facilidad la presa que codician. Cuanto más, si se conoce que el receptor de las adulaciones suele hincharse como un pavo al recibirlas.

Pues algo similar ha sucedido recientemente: “Mohamed VI, muy satisfecho por el ‘nivel de concertación política’ con Zapatero. Es decir, el tirano marroquí, según la agencia MAP y recogido por Europa Press, envió a Zapatero un mensaje con motivo del Día de la Hispanidad, en el que manifestó su gran satisfacción por el “nivel distinguido de la concertación política permanente y constructiva” entre Rabat y Madrid y de las relaciones económicas y comerciales entre ambos países.

Lo que faltaba, ¡ahora me entero de que somos racistas! (497)

El Reino Unido es una nación admirable por infinidad de razones y tal vez la primera de ellas sea el envidiable patriotismo de sus ciudadanos. Un patriotismo que, lamentablemente, en no pocas ocasiones conduce al desprecio de lo ajeno y es el punto en que se convierte en soberbia. Y la soberbia británica, no nos engañemos, a quien le afecte en alto grado acaba por convertirlo en idiota. Tristemente, hay demasiados soberbios de alto grado en las Islas Británicas que van por la vida acusando de racismo a los demás.

Tal y como yo lo veo, en la actualidad los británicos son gente de lo más civilizada y democrática, pero durante buena parte de su historia les ha caracterizado la soberbia y el racismo. No es preciso poner demasiados ejemplos de esa característica, bastaría citar cómo se comportaron en cada una de sus colonias: dando un horrendo trato de raza inferior a los lugareños. Por eso tiene narices que ahora, quizá porque Londres es ya Londostán, se les haya ocurrido acusarnos a los españoles de racistas. Así se desprende de una noticia difundida por la agencia EFE que reflejan varios medios, por ejemplo El Mundo mediante este titular: “Inglaterra se niega a jugar en el Bernabeu”. 

En España tenemos infinidad de defectos, el que más nos retrata en los últimos tiempos es nuestra condición de aborregados respecto a la clase política, que nos está comiendo la patria por los pies y aquí no pasa nada. Cuando un politicastro deja de decir que “el concepto de nación es discutido y discutible”, otro afirma que “la idea de España me la sopla” o un tercero habla del “coñazo” que supone asistir al desfile de las FFAA. Y me refiero solamente a los partidos que se definen de ámbito nacional, que esto sería interminable si tuviese que citar las ocurrencias de los nacionalistas. Es decir, niego que uno de los defectos de los españoles sea el racismo, salvo en el caso de unos cuantos sabinianos del PNV, por supuesto.

sábado, 21 de noviembre de 2015

Llamazares se va, que le den una gran cruz al tonto útil (496)

A partir de que el castrista Gaspar Llamazares dejó de ser el jefe de los comunistas españoles, cuestión que se decidió en una dimisión de última hora y justo cuando sus "camaradas" estaban a punto de arrastrarlo por los pies para echarlo a la calle, hubo al menos tres docenas de personas que, durante meses y lámpara en mano, se dedicaron día y noche a recorrer España en busca de alguien que se acordara del político. El resultado de tan ansiada búsqueda fue incuestionable, lo más cercano al recuerdo de Llamazares se produjo cuando un viejo de pueblo, comunista en sus tiempos mozos y hoy concesionario de la Seat, respondió: ¿Llamazares, lo cualo?

De toda su nefasta y torpe labor, que al más genuino modo soviético ha llevado casi a la extinción a Izquierda Unida, el necio Llamazares afirma ahora, cuando por fin anuncia una dimisión que las bases comunistas le venían pidiendo desde hace muchos meses, que se enorgullece sobre todo de haber encabezado las movilizaciones contra la guerra de Irak. ¿Cuál de ellas, mendrugo? Porque en Irak hubo dos guerras y en la primera, bajo el gobierno de Felipe González, no se os vio el pelo a los de la izquierda sarmentosa —valga la redundancia.

En otro de esos párrafos típicos de un izquierdista demagogo —valga aquí el emparejamiento de sinónimos—, el anticuado Llamazares ha osado nada menos que soltarnos esta frase: “…he dimitido para evitar que la IX Asamblea de los días 15 y 16 de noviembre se convierta en una ‘Asamblea del reproche y del retrovisor, llena de alusiones al pasado”. Ha añadido que “la decisión no ha estado motivada por la ‘presión’ de sus ‘adversarios’ en el seno de la federación”. Pues mira, eso mismo creo yo, que te vas porque no te es posible controlar las adhesiones entusiastas de los militantes y de paso a la treintena de diputados de tu grupo parlamentario. ¡Ah!, que solo son dos diputados contándote a ti. ¡Vaya por Dios, disculpa, un error lo tiene cualquiera!

viernes, 20 de noviembre de 2015

Yo sólo quiero saber de mi abuelo… (495)

El cuadro representa la suma de características positivas que pueden darse en el ser humano. Cuanto más abundantes sean las que poseamos de entre las destacadas en el cuadro, tanto mejor será la sociedad en la que nos hayamos integrado y más alta su moralidad. Ya que sin moralidad, la existencia dentro de una colectividad se convierte en un sin vivir, en una selva.

Es conocido que la degradación moral se originó en el felipato, al efecto recordemos la frase del socialista Tierno Galván: "Madrileños, al loro, y el que no esté 'colocao' que se coloque". Pero esa degradación no fue corregida en la medida necesaria —guste o no leerlo— durante la etapa de Aznar, un personaje eficaz en aspectos como la lucha antiterrorista pero que prefirió dedicar la mayor parte de su esfuerzo a la economía, donde realmente lo hizo bien, aunque desistió de la verdadera reforma política, consistente en imbuir en la sociedad, mediante la educación y las leyes adecuadas, una mayor integridad moral y ética, el apego definitivo a una Justicia independiente —que Aznar no quiso liberar de los partidos políticos—, así como el respeto absoluto a la vida y a nuestros mayores. En frase del británico Charles Kingsley: “La única forma de regenerar el mundo es que cada uno cumpla con el deber que le corresponda”.

La degradación moral a la que nos está llevando el gobierno de ZP, ¡y en tan sólo cuatro años y medio!, ha hecho que hasta los viejos chascarrillos se queden anticuados. De modo que voy a ofrecerles un ejemplo de los años 90 y al final su versión actualizada. En la primera parte de la década citada, cuando, tras una larga etapa de gobierno del PSOE, el número de desempleados llegó a rozar los cuatro millones, era frecuente que alguien explicase de este modo su situación y su propósito:

Sí, estoy en paro desde hace tiempo, vivo a costa de mi padre hasta que pueda hacerlo a costa de mi hijo”.

Teoría de los marxistas y las flores del Ártico (494)

Draba lactea o magnolia ártica, preciosa flor que vive y se reproduce desde hace siglos en el Círculo Polar Ártico y cuya misión consiste, valga la ironía, en darle la razón al Nobel José Saramago, que nos avisó hace unos años de la catástrofe ecológica que estamos montando los de derechas y del calentamiento global que la acompaña, hasta el punto de que según dijo: "...un día de estos comenzarán a nacer flores en el Ártico". 

El enlace a una determinada noticia me lleva a leer un artículo de Saramago, quien en su deseo de afear lo que él considera la incredulidad de la derecha respecto al cambio climático no se priva de dar nombres y apellidos de gente del PP, por ejemplo el de José María Aznar, respecto a la doctrina oficial de la izquierda (las cosas como son), que es la suya, y que el portugués aprovecha para ofrecernos el razonamiento definitivo a fin de que aceptemos su postura: “No importa que un día de estos comiencen a nacer flores en el Ártico”.

Sabes qué, so Nobel, ¡ya nacen flores en el Ártico!, sucede desde hace siglos. Cada año florecen rosas y magnolias en Groenlandia y buena parte del Canadá y Alaska, entre otros países cuyos territorios se encuentran total o parcialmente dentro del Círculo Polar Ártico. ¡Ah!, ¿que te referías al polo polo por la gloria de tu madre? Pues no, ahí jamás nacerán flores, al menos terrestres, porque si se llegara a derretir el hielo del Polo Norte lo que quedara sería puritito mar. No, ahí, en medio del mar no nacerán flores, nacerán alcornoques, una especie que es poco probable sea catalogada como en extinción, a juzgar por su abundancia vegetal y a veces animal. No sé si se me entiende bien el “piropo” que te dedico.

jueves, 19 de noviembre de 2015

Quintacolumnistas marxistas en USA (493)

Falta Trotski para completar la nomenclatura de la infamia. Eso sí, la izquierda de hoy en día se siente muy orgullosa de todos ellos. Véase, sino, esos populismos radicales y totalitarios que recorren toda América, desde México a la Patagonia, y que aquí en España están representados por un tipejo que se autodenomina "Coleta Morada".

La quinta columna marxista en los países democráticos, especialmente en los de Europa occidental y Norteamérica, ha sido siempre de lo más activa. En España, su representación genuina podríamos atribuírsela a la Brigadas Internacionales, financiadas generosamente por la Komintern, es decir, directamente por Stalin, y cuyos componentes eran todos comunistas acreditados. Hubo gente de buena fe, sin duda alguna, pero también hubo mucho canalla suelto, con instinto asesino, que se incorporó a esas brigadas en el intento de saciar su sed de violencia o su radicalidad.

Luego vino la Guerra Fría, que duró hasta la caída del muro de Berlín, y entonces una serie de intelectuales marxistas se posicionaron en el interior de las democracias europeas a favor de la URSS, un imperio de instinto expansionista, de nulo espíritu democrático e inexistente respeto tanto por la vida humana como por la libertad del individuo. Pero los intelectuales marxistas del mundo occidental, a modo de una nueva quinta columna, persistieron en su propagandístico apoyo. ¿A qué obedeció esa actitud tan poco intelectual, tan sinsentido con lo que se sabía ya de la atroz dictadura soviética? ¿A qué obedece que hoy, con lo que se conoce de Cuba, Venezuela y otros paraísos socialistas, por ejemplo, sean tan defendidos esos regímenes tiránicos e incluso la isla-cárcel figure en los libros de Educación para la Ciudadanía como un modelo a imitar?

miércoles, 18 de noviembre de 2015

Me voy a tomar café a Gambia y ahora vuelvo (492)

Banjul, capital de Gambia. Se trata de una población de menos de cuarenta mil personas cuya actividad principal es el comercio de cacahuetes. Sin llegar a ser un microestado, Gambia es uno de los países más pequeños del mundo, si bien cuenta con casi dos millones de habitantes, bastante dispersos en un país que carece de montañas.

No es posible que a nuestro país, España aún para algunos, se le tome más a cachondeo de lo que ahora se le toma. Si el cachondeo fuese una unidad de medida, pongamos una divisa cotizada, hacia Zapatilandia (la España de ZP) se dirigirían todas las burlas, mofas y befas de este mundo. Esas unidades de cuento, que no de cuenta, se mostrarían siempre dispuestas a refugiarse aquí, como si de una fuga de capitales se tratase, al constarle a sus traficantes que iban a ser bien acogidos en este territorio. Al genuino estilo de la Suiza plagada de bancos, importantes partidas de escarnio y ludibrio pasarían a engrosar nuestras cámaras acorazadas. Con una diferencia, los helvéticos son proclives a las cuentas numeradas y secretas, mientras que los hispanos, mayormente en su variedad zapaterina, somos aficionados a divulgarlo todo. Y lo que no se sabe “per se”, se filtra “perque sí”

martes, 17 de noviembre de 2015

Otra muestra de la crueldad del islam (491)

Aunque el símbolo de la Media Luna es de origen otomano y está basado en el sura 54 del Corán, donde se la relaciona con el día del juicio final (la hora se acercó, y la Luna se partió en dos) o con milagros realizados por Mahoma, desde tiempos inmemoriales los pueblos arábigo-semitas han sentido cierta atracción hacia el astro de la noche, luminaria de sus desplazamientos nocturnos a través de las regiones desérticas donde era obligado evitar el calor sofocante del día.

A propósito de los terribles atentados de París de la semana pasada, tengo el gusto de ofrecer a los lectores de Batiburrillo un artículo acerca de la recurrente actitud violenta del islam y el modo en que los musulmanes entienden, como una obligación ineludible destinada a cumplir con el mandato coránico, la necesidad de atentar contra unas personas que para ellos no lo son y que habitan en lo que denominan la Casa de la Guerra. Es decir, pretenden debilitar cuanto puedan a la única civilización real contra la que predican el odio en sus madrasas y mezquitas y sobre la que procuran conjurarse para dañarla cuanto puedan: La Civilización Occidental. No olvidemos que en el islam, a pesar de que lo definen como una religión compasiva, el sentimiento que prevalece entre sus adeptos es el de un mortificante aborrecimiento, sobre todo hacia la cristiandad, que en no pocas ocasiones precisan calmar mediante el uso de la violencia más atroz.

Artículo
Hoy he conocido una nueva evidencia de la poca compasión que algunos países musulmanes nos muestran todavía, lo cual no es de extrañar puesto que nos las habemos ante unos adeptos —hablar de fieles religiosos en el caso de los islamitas me parece inapropiado— que no sólo han permanecido integrados durante siglos en ese estado de beligerancia cuya coartada es la supuesta guerra santa, falsamente conocida como Yihad (1), sino que jamás han secundado de buena fe el mensaje del profeta Mahoma que alude a un Dios clemente y misericordioso (Sura, 1.2) y que debería ser secundado por los hombres en tales virtudes.

lunes, 16 de noviembre de 2015

Cataluña no es España (490)

Estoy convencido de que el Barça ha perdido una legión de seguidores en toda España desde que a partir de Laporta se ha politizado con tanta radicalidad. Nunca ha sido un club muy así, sobre todo desde que comenzó a autodenominarse "Mes que un club" a finales del franquismo, pero ahora ya no se priva de nada a la hora de demostrar en las gradas (o permitir que otros demuestren) que son partidarios de la independencia.

Como vivo en un pueblo de la costa murciana que es ideal para el veraneo, porque ya se sabe que el mar, con sus brisas, ejerce de termostato y en buena medida regula las temperaturas extremas, raro es el año que por estas fechas estivales no recibimos en casa —y lo hacemos encantados— a dos o tres oleadas de familiares que proceden de Cataluña, donde reside casi la totalidad de la familia de mi esposa y también la mía. Sí, reconozco que para una bitácora dedicada a la política, como es Batiburrillo, poco hay de noticioso en lo expuesto en el párrafo anterior, pero si continúan leyendo verán que no es así.

Entre los familiares que suelen visitarnos asiduamente hay varios niños, sobrinos y sobrinas carnales de mi mujer. Una de ellas, de 12 años, creo que es especialmente sensible a todo lo que observa en esta tierra, donde asegura encontrarse feliz durante su estancia. A un “¿cómo lo estás pasando?”, preguntado por su tía, que es catalana de nacimiento y raíces, la sobrina le contestó más o menos lo siguiente: “Muy a gusto, mis amigas de este pueblo siempre me han tratado muy bien”. “¿Y por qué habrían de tratarte mal, nenita?”, fue la siguiente pregunta de mi esposa. A lo que la chiquilla contestó con una serie de razones que a mí, que oía en silencio el diálogo, vinieron a demostrarme una vez más el genocidio cultural y antiespañol que se está practicando en Cataluña.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Las medallas de Carod o la propaganda adoctrinante (489)

La gente como Caroz-Rovira (este tipo cambió la zeta de su padre por una de, de déspota) no desaparece nunca. Pasa como con determinados insectos, que cuando crees que has acabado con la plaga de repente resurgen a la primera ocasión favorable. Y esa ocasión ahora es el follón que se lleva entre manos el Parlamento catalán. Ahora este pájaro acaba de soltar una obviedad: "España no es Suecia y Cataluña aspira a ser como Noruega", por supuesto, y yo aspiro a que me toque la Euromillones que para eso hay un superbote esta semana. Eso sí, lo mío lo comento como un desiderátum sin malicia alguna, él profundiza en el tema de la frase anterior para acabar usando el reproche cargado de odio.

Que Carod es un tipo totalitario no es algo cuestionable, lo atestigua su comportamiento y el de su partido, siempre dispuestos a la bronca y la amenaza, siempre valiéndose de esos “escamots” de jovenzuelos que no dudan en usar la violencia para boicotear el derecho a la libre expresión de otras formaciones políticas o de personajes de relevancia social que opinan de distinto modo.

Recordemos que para los nacionalistas existe un término despectivo para los que uno de sus progenitores no ha nacido en Cataluña: Xarnego. Así, pues, que el xarnego Carod desee la independencia de Cataluña es algo que en principio no tiene relevancia ni debe importarle a ningún demócrata, nada que oponer a los sentimientos de las personas, lo que aquí se pretende destacar son los métodos para difundir esos sentimientos, que en el caso de Carod y su tropa de antidemócratas suelen estar basados en unas falsedades y tergiversaciones que llevan difundiendo desde hace muchas décadas y que alguna vez se deberán contrarrestar en lugar de dejarle el campo libre como hasta ahora.

Con motivo de las Olimpiadas de Pekín, el “talibarretina” Carod-Rovira se ha vuelto a desmelenar, metafóricamente hablando, y ahora afirma que: “Deportistas nacidos, residentes o formados en Cataluña han conseguido hasta nueve medallas, la mitad de las obtenidas por España”. O sea, que para las medallas también es catalán todo deportista residente o formado en Cataluña, no importa si a esa persona le entusiasma participar en el equipo Nacional español (como podría ser el caso de Pau Gasol) o, simplemente, posee otra nacionalidad y en el momento de celebrarse las Olimpiadas o unos campeonatos mundiales deciden marcharse con los suyos. Casos de Messi y Eto’o, por ejemplo.

La naranja mecánica catalana (488)

Hasta tal punto es eficaz el adoctrinamiento producido durante más de 35 años en Cataluña, que muchos que lo han padecido no son conscientes de ello y suelen negar con rotundidad que alguna vez haya existido. Afortunadamente, una parte importante de la población catalana hace tiempo que es consciente de ese adoctrinamiento y ha venido neutralizando en casa las ideas que sus hijos llevan consigo desde el colegio y otros centros educativos, de ahí que el separatismo no haya superado el umbral del 50% de votantes en las últimas elecciones. 

Gracias a mi amigo Elentir, que tiene la habilidad (en realidad lo suyo es un don) de encontrar buena parte de esas noticias o imágenes que nos pasan desapercibidas a la mayoría, sean buenas o malas, sean agradables o de lo más lamentable, pero siempre útiles para deducir dónde vive uno y de qué pie cojean los demás, he podido detectar una nueva prueba del porqué los nacional-separatistas reciben el 90 % de los votos en Cataluña: Los votantes están sometidos al adoctrinamiento más inmoral, por tierra, mar y aire, las 24 horas del día y los 365 días del año. Un adoctrinamiento colectivo y de larguísima duración, quizá parodiado al máximo en el filme la “Naranja mecánica” de Stanley Kubrick, que el socialista Iceta candorosamente ha admitido en una cadena de radio que controlan los suyos.

Y claro, no hay ser humano capaz de soportar a pie firme algo así, tan de continuo, sin que acabe marchándose de Cataluña para conservar la integridad moral e incluso la física, como podría ser el caso de Federico Jiménez Losantos y otros firmantes del “Manifiesto de los 2.300”. La alternativa a votar con los pies (algún día se sabrá que esa opción ha sido elegida en Cataluña por mucha más gente que en el País Vasco) es pasar a un estado catatónico respecto a la política o la vida pública: de casa al trabajo y del trabajo a casa, sin mezclarse en nada más e incluso sin llegar a votar en las elecciones, especialmente las autonómicas. Es decir, el exilio interior. Eso sí, no pocos optan por integrarse en el rebaño, dispuestos a nadar a favor de corriente para lograr la bicoca y acaban balando como el primero. Lo que finalmente da ese 90 % de voto nacionalista.

sábado, 14 de noviembre de 2015

Cataluña hacia el suicidio (487)

El Tripartito 2, que fue el presidido por un florero llamado Montilla, no solo se caracterizó por derrochar a manos llenas (al efecto recordemos que Carod subvencionaba todo tipo de asociaciones pancatalanistas en el Levante y Baleares, así como colegios en el sur de Francia) sino que se establecieron una serie de leyes y normas, amparadas en el nuevo y liberticida "Estatut", que en realidad fueron el desencadenante del actual proceso de sedición. De hecho, como he oído a más de un analista de primera fila, Carod solamente fue el brazo ejecutor entusiasta de otro sujeto (compinchado con Artur Mas) al que podríamos considerar el responsable absoluto de la actual situación catalana: José Luis Rodríguez Zapatero.  

En tiempos del Tripartito catalán (PSC-ERC-IV), con el visto bueno de ZP, un presidente socialista cuya principal característica ideológica fue el "todo vale", se dio la vuelta de tuerca definitiva para iniciar en 2008 una deriva separatista que en la actualidad ha llevado al Gobierno catalán (en funciones) al inicio de la sedición. De Esquerra Republicana de Cataluña, un partido de comportamiento claramente nazi, podía esperarse lo de entonces y lo de ahora, si bien del PSC y de los comunistas la cosa nunca ha estado tan clara. De lo que se deduce que si la sedición se inició en 2008, ERC engañó a sus socios de gobierno, a los que interpuso como parapeto parlamentario porque carecía de fuerzas propias suficientes, como le ocurre ahora. Veamos el artículo:

Cataluña hacia el suicidio
El Gobierno de Cataluña —por llamar de algún modo a un grupo de déspotas que no me parece que gobiernen en absoluto— ha vuelto a dar otra buena muestra de nepotismo, una “cualidad” que, como todo el mundo sabe, constituye uno de los rasgos que caracterizan a los totalitarios. Me refiero al nombramiento a dedo del hermano de Josep Lluis Carod-Rovira, un tal Apel.les, como Delegado de la “Generalitat” en París. O sea, una designación “a pelo”, valga el juego de palabras, efectuada por el capitoste separatista y sin encomendarse a nadie de su partido —lo cual era obligado en el caso de un alto cargo— ni informar previamente de tal decisión en la orden del día del Consejo de gobierno de Cataluña. Es decir, Roviretxe ocultó a sus colegas de Gabinete que había pactado con Montilla enchollar al hermanísimo. La crónica del ABC adereza las circunstancias de ese nombramiento con este piropo: “con premeditación y alevosía”.

viernes, 13 de noviembre de 2015

¿Es conveniente llamar nazis a los nazis? (486)

Nada hay en este fanático totalitario, incluidas la parafernalia y la propaganda a la que destina millones y millones de euros de dinero público, que le aleje del más genuino ceremonial nazista, como se observa en su gesto. De momento, solamente ha practicado el genocidio lingüístico en la educación y ha multado a los que rotulaban en el idioma oficial de toda España, el castellano, pero habría como para aterrorizarse si al final no se pudiera impedir una república de Cataluña presidida por este tirano in pectore.  

Del mismo modo que en las décadas de los años 60 y 70, hasta la muerte del dictador, nuestros vecinos franceses cercanos a la frontera se pusieron las botas ofreciéndonos a los españoles lo que entonces prohibía el régimen, es decir, cine erótico o pornográfico, además de casinos donde practicar los juegos de azar y unas cuantas librerías bien surtidas que incluían prensa libre, hoy, para vergüenza absoluta de los que prefieren ignorar el problema creado por los nazis con el idioma español, algo que se da en diversos grados y principalmente en las regiones de Galicia, Vascongadas y Cataluña, nuestros vecinos de entonces, además de los portugueses, deben estar de nuevo frotándose las manos. Nace una nueva industria auspiciada por el nazismo asentado en las regiones periféricas españolas, que deberá enriquecer a las zonas fronterizas de Portugal y Francia: La educativa.

miércoles, 11 de noviembre de 2015

‘Socialismo es libertad’ (485)

Los ideales políticos a menudo son fruto del atolondramiento que conlleva la edad. Como dice el refrán de no recuerdo quién: Si a los 20-30 años no eres de izquierdas, es que no tienes corazón; si a los 40-50 años no eres de derechas, es que no tienes cabeza. Y salvo contadas excepciones ha sido así la evolución natural en la política: pasar de la izquierda a la derecha, de los pajaritos volando, las promesas incumplibles y los eslóganes huecos de contenido, a una más palpable realidad de este mundo representada por gente sensata y madura, de derechas. 

Nada ha cambiado en el socialismo desde que escribí el artículo, cuando aún gobernaba el estrafalario ZP. El socialismo de ahora, cuyo jefe es Pedro Sánchez, ha pactado con toda clase de separatistas y antisistemas propensos al totalitarismo. Y algo así, que nadie lo dude, dista mucho de considerarse válido para clamar que "¡socialismo es libertad!". Ni siquiera las dos últimas entrevistas de Sánchez con Rajoy sobre el tema de la sedición en Cataluña, destinadas a la propaganda para evitar quedarse en 30 diputados, atenúa la sensación que uno tiene de que esta gente ladra de un modo y luego muerde de otro. Es decir, practica un tipo de hipocresía de lo más completita y al alcance de muy poca gente en el mundo de la política.

Socialismo es libertad
Si en el 78, a poco de aprobarse la Constitución española, alguien me hubiese asegurado en Barcelona, donde por entonces residía, que 30 años más tarde los socialistas (¿?) cerrarían una emisora de radio en Cataluña o no le renovarían el permiso ─que es exactamente lo mismo─ como consecuencia de que sus emisiones son en castellano, estoy seguro de que con no poco énfasis le hubiese contestado: ¡Tú estás loco, algo así es imposible! ¡Eres un tipo alarmista que no digiere la democracia y atufas a facha! ¡Socialismo es libertad!

lunes, 9 de noviembre de 2015

Segundo nueve de noviembre insurgente en Cataluña (484)

En la imagen, diputados del grupo Popular que demuestran su lealtad a la Ley exhibiendo banderas de España y Cataluña. La escena corresponde al interior del parlamento en el momento en que se ha aprobado la resolución sediciosa. Tomad nota, sediciosos: Si vuestra intención es incumplir la legalidad vigente, entonces os habéis situado fuera de la democracia y a lo vuestro solamente es posible llamarlo por su nombre real: intento de golpe de Estado, que es muy parecido a lo que el 23 de febrero de 1981 intentó Tejero.   

Esta vez ha sido un acto sedicioso, antidemocrático y plagado de cobardía en el Parlamento catalán.

La borregada del Junts pel 3%, a cuyos componentes cabe atribuirles no solo un acto de sedición, lo que de por sí ya es un delito penal que algunos esperamos que purguen entre barrotes, sino que unos cuantos de ellos están inmersos hasta las cejas en esa Cosa Nostra creada por el mafioso Pujol, y por lo tanto las bancadas de estos golfos en el "Parlament" atufan a cierto "arôme de corruptión" que invita a la náusea si se pasa muy cerca de ellos. No todos son así, desde luego, pero de casi todos los politicastros del JX3%, comenzando por el desquiciado Arturu Mas —cómplice del Padrino en Cap e hijo y heredero de su testaferro durante años—, es posible asegurar que son doblemente delincuentes.

A saber: Los de la banda del JX3% entran de lleno tanto en la categoría de sediciosos como en la de chorizos, por decirlo en un lenguaje nada académico pero muy al alcance del pueblo llano, que lo entenderá perfectamente y lo secundará, salvo aquellos que posean una mentalidad de lo más comprensible para esta banda de traidores, en cuyo caso se pillarán un buen cabreo al leer el presente texto. Pues bien, a esos que les den dos duros.

domingo, 8 de noviembre de 2015

La frialdad de Aznar, todo un síntoma (483)

La mayor evidencia de que José María Aznar fue un gran presidente del Gobierno de España es el odio que despertó en la izquierda y el nacionalismo. No obstante, siempre he considerado que Aznar, igual que Adolfo Suárez, fue un poco pardillo al no prever la deriva que tomaría la casta separatista catalana (y el nacionalismo en general) y por lo tanto no hizo nada para frenarla cuando realmente pudo. Por lo demás, en la época de Aznar la Nación española gozó del mayor prestigio internacional y el presidente, que logró imponerse en Niza y otras cumbres europeas, se mantuvo como un referente de la política eficaz durante bastantes años. Incluso hoy, desde la fundación que preside, son numerosos los documentos e informes que salen a la luz y alcanzan un alto nivel de aceptación. 

En no pocas ocasiones se me ha acusado de pepero incondicional. Reconozco que es cierto pero solo a medias, ya que mi espíritu crítico me lleva a resaltar lo que considero que son unos fallos muy destacados que, de corregirse, a buen seguro llevarían al PP a ser el partido más valioso del arco parlamentario. Y esa corrección debe iniciarse en la actitud de la persona que encabeza el partido, Mariano Rajoy, demasiado quieto para mi gusto en multitud de cuestiones de gran trascendencia. En pocas palabras, pepero sí, pero ni incondicional ni de Rajoy, salvo que acabe por ponerse las pilas algún día, que lo dudo mucho porque a cierta edad ya no se cambia.

sábado, 7 de noviembre de 2015

Un nuevo acto de salvajismo nacionalista (482)

No nos engañemos, las fechorías nacionalistas sobre el idioma español van siempre encaminadas al mismo fin, alejar de España a los jóvenes sometidos a ese tipo de enseñanza, es decir, imbuir a los futuros votantes, mediante el adoctrinamiento, de cierto desprecio (por no hablar de odio) a todo lo que no se considere "propio". O lo que es lo mismo, expandir el nacionalismo a la mayor velocidad posible y mediante el uso de cualquier falsedad que se considere práctica de cara al fin último: la independencia. 

En dos o tres centenares de artículos, de los más de 1.500 que en Batiburrillo llevan mi firma, he asegurado de muy distintas maneras y con ejemplos exhaustivos que el gran mal de la política en España es el inmoral y farsante sistema de comunidades autónomas. Farsante por cuanto los nacionalistas rompieron las reglas del juego casi desde el inicio de la Transición y nunca se han contentado con nada, ni lo harán. Una postura sobre la que los partidos nacionales han preferido adoptar, en una especie de "tente mientras cobro", la estúpida política del avestruz. Y es evidente que lo han hecho así por conveniencias electorales, a fin de no cerrarse las puertas a posibles apoyos parlamentarios o coaliciones de Gobierno.

Debe quedar claro que a los nacionalistas tampoco les bastaría si se les concediera la independencia, inmenso error por el que aboga un número creciente de españoles que se han hartado de verse sometidos al continuo chantaje de los Ibarretxe, los Mas o los Carod de turno. Digo que no les bastaría la independencia porque al instante siguiente de lograrla estarían reclamando para sí unas cuantas comarcas o regiones aledañas. Y conseguidas éstas, a por las siguientes y luego otras y otras más. Incluso, en el mayor de los desahogos, he llegado a leer que los nazis vascos exigirían en el acuerdo de independencia un cupo mínimo para sus exportaciones a España.

Principios o poder, he ahí el dilema (481)

Los principios políticos suelen estar basado en los valores, es decir, en aquellas cuestiones que el ser humano valora lo suficiente porque las considera esenciales. Por ejemplo, el respeto a la vida, que debe ser escrupuloso desde antes de la cuna (feto) hasta la muerte natural. Otro ejemplo vendría determinado por la alta consideración que la libertad individual le merece a quien posee valores, porque la libertad, junto al respeto a la Ley, es esencial para que la democracia exista. Y así podrían citarse unos cuantos valores que son los que hacen que un partido político, si los respalda y los mantiene, valga la pena que lo escojamos para otorgarle el voto.

Un partido político tiene dos opciones esenciales de comportamiento: principios honorables o poder a toda costa. Los socialistas españoles han buscado desde siempre el segundo de los objetivos citados y, al mismo tiempo, han renunciado expresamente al primero. Al efecto recordemos que la etapa de Zapatero se caracterizó por un descarado "todo vale", es decir, la ausencia absoluta de valores.

El PP de Rajoy está ahora en esa misma búsqueda, de ahí que el jefe de los populares —a extinguir— alardee de unos principios que no expone con claridad pero que él dice que tiene; de ahí, igualmente, que ayer se viera cómo le secundaba la "Tabla Redonda" casi en pleno, es decir, esos barones regionales poco interesados en un jefe nacional de principios firmes y honestos, capaz de transmitirlos y hacerlos cumplir por encima de los intereses autonómicos que ellos representan.

viernes, 6 de noviembre de 2015

Subvenciones, yo te doy una cosa a ti y… (480)

La izquierda en general y el nacionalismo en particular han sido siempre partidarios del clientelismo. Cuantas más personas dependan de ellos, tanto mejor. Aseguran así, mediante la subvención periódica (que comprende el nepotismo, el amiguismo y el enchufismo), la fidelidad de unos votos que en otras circunstancias difícilmente les llegarían como consecuencia de la ineficacia que siempre han demostrado a la hora de la creación de riqueza. O lo que es lo mismo: "La izquierda es útil hasta que se le acaba el dinero de los demás".  

Cuanto huela a subvención me repele, ya que con muy pocas excepciones me parece el sistema más inmoral, por lo arbitrario, de calentarles el estómago a algunos vagos incondicionales o de favorecer a los listos, demasiado listos. En realidad, la subvención no deja de ser un trueque que sigue la estela del refrán conocido: El que regala bien vende si el que lo acepta lo entiende, o algo así. Cuanto más, si se considera que quien subvenciona, casi siempre una administración pública, y está claro que no lo hace con su propio dinero ni con el del partido que gobierna.

Sí creo, no obstante, en los donativos o en el mecenazgo entre particulares, porque cada uno puede hacer lo que le apetezca con su dinero y el patrocinio responde a menudo a causas filantrópicas y deseos de secundar la cultura o el arte. Siendo ambos, arte y cultura, la sal de una sociedad cada día más descarnada y echada en brazos de la apatía y la rutina, origen, a su vez, de esa televisión basura que ocupa la mayor parte del tiempo de nuestros conciudadanos, lo cual es una circunstancia que les viene de perlas, por cuanto ayuda al embrutecimiento de las masas y a que las fechorías políticas pasen desapercibidas, a esos cargos públicos de vileza contrastada que nos han tocado en suerte en estos días no de pan y circo, sino de pizza y culebrones; eso sí, con la variante juvenil del botellón o la exhibición de motocicletas practicando el caballito desbocado por las calles. ¡Penoso!

jueves, 5 de noviembre de 2015

Marcel.lí o el agua como repugnante instrumento político (479)

No es precisamente una visión de Estado lo que caracterizó a Marcelino Iglesias, Marcel.lí para sus muchos amigos nacionalistas catalanes. Si acaso lo que este hombre demostró en sus años al frente del gobierno de Aragón fue una rotunda miopía, porque con tal de mantenerse en el poder mediante el uso de la consigna populista apostó por eliminar el Plan Hidrológico Nacional, del que hizo bandera en contra aunque sin llegar a percibir que de haberse realizado dicho plan quien más ganaba, con gran diferencia, era el propio Aragón, a cuyas obras se destinaba la parte del león de las inversiones en infraestructuras. En resumen, parece que Marcel.lí fue partidario de la mezquindad y del viejo aforismo: Yo me quedaré ciego pero a ti te saco un ojo. 

Uno de los políticos más sectarios dentro del mundo de la izquierda digamos… española, título bastante difícil de alcanzar puesto que la materia prima abunda por doquier entre los que practican tal ideología, es, sin duda alguna, Marcelino Iglesias —o Marcel.lí, como se le conoce a causa de sus veleidades nacional-catalanistas—.  Pues bien, resulta que al personaje no se le ocurre ahora otra cosa, de cara a la galería en Aragón, que anteponer la mezquindad y el interés a su criptocatalanismo cada vez más confeso. Dos posturas que, lógicamente, se dan de patadas si se pretenden aunar. Me explico:

Aragón ha sido desde siempre una comunidad al alcance de cualquiera de las dos formaciones políticas mayoritarias. De hecho, tanto PP como PSOE han gobernado la región, si bien con los votos de un tercer partido de extraña trayectoria, el PAR, que ha ido pasando de la derecha hacia la izquierda en sus diversos congresos y ahora es, sencillamente, nacionalista a secas. Es decir, la alternancia política de los partidos en Aragón —algo siempre recomendable para cualquier territorio— estaba poco menos que garantizada mediante dos tendencias hegemónicas, más un partido bisagra, el PAR, y otros dos grupúsculos de chichinabo que no sé dónde catalogarlos, salvo en el esperpento, y que atienden a los nombres de Chunta Aragonesista e Izquierda Unida.

miércoles, 4 de noviembre de 2015

España (artículo inédito) (478)

La maravillosa plaza de España en Sevilla podría ser un bello símbolo de nuestra patria. A quien haya recorrido el lugar le habrá ayudado a despertar el sentimiento de patriotismo observar que alrededor de tan admirados edificios se encuentros los escudos de todas las provincias españolas, en mosaicos de losetas esmaltadas a todo color. 

Al contrario de esos países de primera fila cuya unidad jamás cuestionan sus habitantes, España es una nación cargada de problemas que necesita una gran causa común para sobrevivir y comenzar a dejarse de despropósitos separatistas y lamentos pedigüeños de los que no poseen demasiada afición a doblar el lomo, y que cada cual asigne las regiones españolas que considere oportunas tanto al grupo de los pedigüeños como al de los vagos.

España no ha estallado ya en mil pedazos porque la mayoría de los españoles debemos ser de una pasta especial y, desde luego, porque hace tiempo que nos tomamos cualquier arbitrariedad a cachondeo, por muy marcada que ésta sea. Pero todo tiene un límite y en algunas regiones no andan muy lejos de superarlo, como consecuencia de la falta de un principio fundamental en cualquier nación: el de la autoridad del Estado. Evidentemente no hablo de ese Estado opresor y aficionado al latrocinio que tanto nos repele a los liberales, sino de un Estado si se quiere mínimo, cuya misión esencial es cumplir y hacer cumplir las leyes.

Nueva evidencia del régimen despótico vasco (477)

Si no hay elecciones libres es difícil que haya democracia, pero si solamente hay elecciones y no se dan otras circunstancias complementarias, como la libertad de expresión, la prensa libre o la falta de coacción y violencia, entonces esa democracia tendrá el mismo valor que cuando se vota en las dictaduras. 

He asegurado en varias ocasiones que en el País Vasco no existe la democracia. Y otro tanto o más podría afirmarse de la situación que se ha vivido y se vive en Cataluña. El hecho de que la comunidad vasca disponga de un Parlamento propio y se vote periódicamente no enmascara la falta de libertad política, condición imprescindible para que en un territorio se dé la democracia. No estaría demás recordar, al efecto, que en las tiranías contemporáneas, como puedan ser las existentes en Cuba o Marruecos, por ejemplo, o en los ya extinguidos regímenes comunistas de la Europa oriental, URSS incluida, igualmente se venía practicando el paripé de las votaciones periódicas.

Una nueva encuesta del gobierno vasco viene a demostrar mi impresión de la falta de libertad y democracia en ese territorio. Según dicha encuesta, 3 de cada 4 ciudadanos vascos no se sienten libres para hablar de política con todo el mundo. Si a esa encuesta le sumáramos las opiniones de los más de 200.000 exiliados vascos que el régimen nacionalista ha ido expulsando, probablemente estaríamos hablando de unos números que rebasarían ampliamente el 80%.

lunes, 2 de noviembre de 2015

“El infierno vasco” (476)

Esto es un ejemplo de lo que podría pasar en una comunidad no sometida al adoctrinamiento intensivo como ha sucedido en tres o cuatro regiones españolas, sobre todo en el País Vasco y en Cataluña.

El País Vasco ha sido uno de los ejes, junto a Cataluña, del aventurerismo político del socialista Rodríguez Zapatero. Todo mueve a pensar que en los próximos cuatro años, o lo que dure la legislatura, ambos territorios seguirán marcándole la agenda diaria de sus improvisaciones, que es a lo más que llega alguien del que no se sabe con qué pie va a levantarse y cuál será su capricho en la nueva jornada. El otro eje vendría constituido por Andalucía y Extremadura, que por distinto motivo, probablemente más relacionado con el nepotismo que en ambas comunidades se practica, ha merecido igualmente la atención de quien ha presidido los consejos de ministros. Me niego a usar el término gobernar para semejante insuficiencia.

Resulta curioso observar, sin embargo, el extraordinario resultado electoral obtenido por los zapaterinos —insisto en que el socialismo es algo distinto— en las comunidades que ostentan un régimen tan “singular”. Si uno se fija bien, el buen resultado logrado en las urnas en esas regiones contrasta con el hecho de que en ninguna de ellas se practique la democracia tal y como es entendida en los estados más consolidados de la Unión Europea. Una Unión donde los políticos se dedican casi en exclusividad a lo económico, conviene recordarlo, y demasiado poco a la defensa de los valores más esenciales, como son la libertad y la justicia, a la hora de conceder la homologación necesaria a sus asociados. Aun así, lo extraño es que la UE no le haya dado aún un toque de atención al gobierno de España, indistintamente cuando éste fue ejercido por el PP o el PSOE, a fin de que democratizara la totalidad de la geografía española.

Tremendo revolcón del exministro Corcuera al separatista Jaume Jaume (Video)



El exministro José Luis Corcuera ha demostrado que no pierde la forma, al contrario, como tantas personas que llegan a los 70 años de edad con la vida hecha y requetehecha, puede permitirse el lujo de hablar claro a la cara de su fanatizado oponente, en este caso un tipo "listillo" que en la tertulia de anoche, del Canal 13, reprochaba a Corcuera que apostara por aplicar con contundencia la ley y le pedía diálogo y que se usara más la democracia, pero un diálogo no para llegar a un acuerdo y que Cataluña se quedara en España, sino para marcharse amigablemente, que es lo que le interesa a esta gente separatista para seguir exprimiendo los mercados cautivos que el empresariado catalán ha tenido para sí durante varios cientos de años.


Naturalmente, Corcuera le dio una réplica que fue tan contundente como merecida, y cuyos argumentos prefiero no desvelar a fin de que el espectador la disfrute. Eso sí, se trata de un vídeo que vale la pena verlo de principio a fin. 

domingo, 1 de noviembre de 2015

Esquerra sigue con la daga oculta (475)

Uno de los pocos partidos que somete a sus militantes a la propaganda continuada sin duda es ERC, cuyo líder actual, Oriol Junqueras (ya veremos hasta cuándo) no duda en usar todo tipo de falsedades con tal de mantener "prietas las filas". Por ejemplo, el eslogan de la imagen es "Un nuevo país para todos", repito "para todos", cuando se sabe a ciencia cierta, por las declaraciones del difunto Heribert Barrera y otros significados esquerristas, que nos las habemos ante un partido de lo más racista y xenófobo, dispuesto a expulsar a una parte de la población de Cataluña si ellos alcanzaran el poder después de la ansiada independencia.

Siempre se ha dicho que Esquerra es un partido fiable porque en ningún momento sus dirigentes han ocultado la intención de segregar a Cataluña de España y de hacer todo lo posible para incorporar más tarde las regiones que ellos denominan Els Països Catalans, es decir, la Comunidad Valenciana, las Baleares, el sureste de Francia, una parte de Aragón, a la que denominan Franja de Ponent, y el altiplano de la Región de Murcia, que comprende los municipios de Yecla, Jumilla y algún otro que ahora no recuerdo.

Para lograr algo así, ERC se ha ido fijando la estrategia de “tocar” poder, que equivale a manejar presupuesto, incorporándose siempre que ha podido a los ayuntamientos, con o sin pacto de por medio, y aliándose con el PSC en el gobierno de la Generalidad catalana. Una vez dentro de las instituciones, su política ha consistido en catalanizar todo lo que tuviese a mano, preferentemente en detrimento de cualquier idea de España o del idioma común, el castellano. Digamos que el sistema de Esquerra es similar al de la carcoma, que se adentra en un cuerpo para roerlo, nutrirse hasta saciarse y acabar con él.


El líder indiscutible necesita asesores (474)

A la hora de invertir en actividades improductivas, como pueda ser un alto números de empleados públicos escogidos a dedo (los funcionarios del Estado son algo muy distinto que han accedido al cargo mediante un gran esfuerzo), los izquierdistas en general y el socialismo en particular se caracterizan por una generosidad fuera de lo común. ¿Asesores? ¡Cuantos más mejor, bien pagados y a nuestro servicio exclusivo!

Pasmado me quedé hace unos días cuando leí que Rodríguez Zapatero contaba con 682 asesores personales por el módico precio de 28 millones de euros, lo que sale a un promedio de casi siete millones de pesetas/año por barba. O sea, medio kilo mensual por catorce pagas para cada asesor. Y digo asesores personales, ya que es evidente que cualquier funcionario del Estado debería estar en condiciones de asesorar, a coste de nómina algo más que mileurista y dentro de la especialidad a la que haya opositado, al administrador en jefe del “cortijo” en el que se ha convertido la Moncloa, cuyo titular no es otro que el presidente del Gobierno. Pues bien, no parece que dentro de esa corte de los 682 consejeros de la “Tabla Elíptica” —otros dicen que en forma de “Z”— haya muchos funcionarios de carrera. Rodríguez sabrá la razón y los demás la sospechamos.

Está claro que si se recurre a los profesionales de la Administración, muchos de los cuales poseen una eficacia más que demostrada y no pocos proceden, además, de la etapa felipista, lo que en teoría debería otorgarles cierta simpatía hacia esta cosa que algunos hemos dado en llamar izquierda zapaterina —no confundir con la izquierda normal—, el pastón que puede ahorrárseles a los contribuyentes no es nada despreciable, aunque la partida sea puro chocolate de loro en comparación con otras cantidades graciables que Rodríguez ha destinado a ensalzar su propia causa.