lunes, 18 de febrero de 2013

¿No hay mantas? ¡Lo que no hay es vergüenza!

¿Qué extraño virus asola a los "artistas" e "intelectuales" españoles como para que nunca desperdicien la ocasión  de soltar veneno antisistema? Candela Peña, a consecuencia de unas declaraciones que rozan el vómito, ha venido a demostrar que una grave infección progre la acomete. Quizá esta chica debería meditar que lo suyo tiene cura a medio plazo: Basta con tomar una dosis de veracidad al día y de vez en cuando un enjuague bucal con licor de honradez.

El gobierno del Partido Popular (malas lenguas insinúan que se trata del Gobierno de España) nunca ha sido capaz de controlar ni una parte de los muchos conflictos que la izquierda sarmentosa primero crea o fomenta a conciencia —pongamos la burbuja inmobiliaria durante los dos mandatos de Zapatero— y ahora denuncia en la calle a golpe de pancarta-falsedad, eso sí, con el propósito innegable de desprestigiar a la derecha acomplejada. Tal sería el caso de los desahucios, una responsabilidad atribuida ahora en exclusiva a los inquilinos de la sede pepera en la calle Génova, donde el progrerío se manifiesta un día sí y otro también sin tener en cuenta que gran parte de los desahuciados integran desde hace tiempo las filas de esos 5,3 millones de parados dejados por ZP.

Es normal que así sea y que a los populares les lluevan los guantazos por todas partes,  ya que el PP, apocado de siempre, hoy está dirigido por un sujeto sin carácter y sin sentido de Estado, es decir, sin ese mínimo de arresto o cuajo político que se precisa para aplicarles la ley o sacarles los colores a las sabandijas callejeras deseosas de crear inestabilidad, cuyas manifestaciones, sean en las avenidas de cualquier ciudad sean en un auditorio público en la entrega de los premios Goya, acostumbran a ir adornadas del más burdo engaño o medias verdades. Por ejemplo, ¿qué hay de cierto en las declaraciones de esa sedicente actriz que asegura que su padre murió en un hospital público que carecía de mantas y agua?

¿Cómo es posible que el Gobierno no haya anunciado ya una investigación al respecto, destinada a poner en su sitio a la Dirección del hospital, si fuese el caso, o a presentarle a Candela Peña una querella por calumnias? ¡Ah!, ¿que el hospital se encuentra en Viladecans y pertenece a la red sanitaria de Cataluña?, ¡y qué más da! En todo caso que la denuncia se sustancie en un juzgado de Barcelona y los de la Generalidad se presenten como parte afectada, si les apetece. Pero lo que no puede ser es que cualquier zarrapastrosa, y Candela sin duda lo es al haberse pronunciado de semejante guisa, acabe por desprestigiar aún más a una sanidad española que curiosamente ha sido usada por media Europa para operarse gratis total. Y menos mal que en ese tema el Gobierno actual puso algún coto a tanto derroche. ¿No hay mantas? ¡Lo que no hay es vergüenza!

18 comentarios:

  1. Pedro, lo de esta Candela es para no volver a verla nunca más. Sus críticas no se sabe si son críticas a la sanidad de Zapatero o alabanzas a la privatización de la sanidad para que pueda haber agua corriente en los hospitales tercermundistas de este pobre país nuestro. Sinceramente, da vergüenza ajena esta chica.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues, sí, aunque de tono menor es un tema parecido al de Almodovar, sobre el que me prometí no volver a ver una película suya cuando aseguró que el rey evitó un golpe de Estado de la derecha el 11-M.

      Eliminar
  2. El presidente de la autonomía catalana fue, hasta el 27 de diciembre de 2010, el ínclito Montilla. Y a este lo pusieron ahí los imbéciles de ERC.

    O sea, cuando murió el padre de la Candela esta gobernaba los amiguetes catalanistas de pro. Y resulta que las competencias en sanidad las tiene la autonomía catalana. Por cierto, una de las peor gestionadas de España, ni no la peor.

    Así que la Candela esta debería darles candela, o sea, a la Generalitat. Presentar una denuncia contra el Hospital y contra el organismo gestor de los hospitales catalanes. O sea, contra su gobierno autonómico. Eso es lo que debería hacer y no endiñar el muerto, de una forma tan hipócrita y vergonzosa, disparando y escondiendo la mano.

    Sin embargo, no parece que haya habido ninguna denuncia, ni siquiera una simple reclamación en el propio hospital. Lo cual resulta sospechoso. Con la cara dura que ha demostrado tener esta Candela no me extrañaría que lo de su padre fuera mentira y todo sea un montaje.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si Candela, en lugar de una propagandista de la izquierda cutre, que quiere trabajo y así cree que hace méritos para que se lo den, fuese una persona como Dios manda y lo de su padre además fuera cierto, lo adecuado es que hubiese reclamado en el hospital y más tarde presentado una denuncia. ¿Por qué no lo hizo y en el hospital dicen que no les consta nada? Cualquiera sabe.

      Eliminar
  3. Muy bien, Don Pedro, has puesto las cosas en su debido lugar porque aquí y ahora, por culpa de un gobierno de broma (util para dirigir una churrería exclusivamente) los desalmados han propalado lo que les da la gana y las tontas de bote teñido se lo creen.

    Toda esa gentuza de los Goya vive del Erario Público y debieran de ser los primeros en estar muy calladitos. Si hubiera gobierno en el país hace tiempo que se habrían terminado esos chollos con una Ley prohibiendo TODO TIPO DE SUBVENCIONES PÚBLICAS.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Exacto, subvenciones cero, pero todo el mundo. Mira lo que ha hecho otro subvencionado, el peruano Evo Morales, que después de recibir una pasta cada año de España va el tío y anuncia requisa de otras dos empresas españolas. No tenemos arreglo a la hora de tirar el dinero.

      Eliminar
  4. Es verdaderamente lamentable la muerte del padre de esta Sra/Sta, (ignoro su situación civil) como lamento la muerte de cualquier ser humano, cuando se produce.
    Es verdaderamente lamentable que, el pobre señor, muriera de, o con frío (supongo) a falta de una manta o, quizá, de sed (sigo suponiendo) a falta de un vaso de agua que, según la Sra/Sta Candela, “nadie le dio, incumpliendo los mandatos mínimos del catecismo (dar cobijo al pobre, dar de comer al hambriento y de beber al sediento), incluyéndola, por lo dicho, a ella misma. ¿No estaba acompañando a su querido padre, en tan señalado trance y fue, por tanto, incapaz, de proporcionarle agua y calor o, al menos, reclamarlo a las enfermeras del turno qué correspondiera?
    Bien. Pero el verdadero cogollo de la cuestión es: ¡su querido padre murió, parece ser, hace tres años! ¡TRES AÑOS! ¡EN UN HOSPITAL DE BARCELONA! “¡siempre vamos a parar, de una u otra forma, a la Andalucía de los ERES, o a la espinosa Cataluña!”
    Si la aritmética temporal no almacena fallos y la información política no nos ha cambiado fechas y personajes, esa recriminación la debería hacer a sus queridísimos amigos de la izquierda cerril española.
    Me explico:
    1º) En esas fechas, quién se sentaba en el sillón de Moncloa se llamaba José Luis Rodríguez Zapatero (remedo de Largo Caballero, versión siglo XXI) quién dirigía, con mano firme, el timón de las huestes socialistas de España y, con ello, todo lo que fallara (o no) desde Madrid, en cualquier dirección. Cataluña incluida, si no hubiera sido sanidad de su competencia.
    2º) Las competencias de sanidad, en esa época, habían sido cedidas, tiempo ha, a la comunidad catalana y el óbito lo fue en Barcelona, donde hacía lo propio el señor Montilla (el de los 1.000 millones de La Caixa), con ayuda de sus amiguetes del alma, señores Carod Rovira y correligionarios del tri-partito.
    ¿A qué y/o a quién coño está reclamando esta Sra/Sta Candela? ¿A quién coño está reclamando esa supuesta e increíble falta de asistencia?
    Y, a ella misma, ¿no se le cae la cara de vergüenza con el asunto del agua o de una mantita que, en buena lógica, debía haber proporcionado a su pobre padre? Su padre no murió exclusivamente desatendido por las autoridades sanitarias de turno. Ella, Candela, forma parte del problema que, siendo su “pobre” padre el hospitalizado, no ayudó a solucionar.
    Siento lo que ocurrió a su padre pero detesto, aborrezco y deslegitimo, las palabras de este “ente” contagiado, sin duda, del virus Barden y esa plaga bíblica titiritera que estamos sufriendo.
    Niolvidoniolvidaré

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ni más ni menos, Miguel. Más claro imposible. Gracias por anotar y bienvenido a Batiburrillo. Un saludo cordial.

      Eliminar
  5. Personalmente estuve hospitalizado (cuestión de cáncer linfático) durante casi dos meses en el Hospital de La Ribera, en Alzira (Valencia) y, cuando abandoné el hospital para seguir, ambulatoriamente, los tratamientos a que hubo lugar, durante meses, sentía “síndrome hospitalario”. Las atenciones médicas, de enfermería (en sus distintos turnos) secciones de radio, etc. fueron de una calidad y de una excelencia dignas de mención.
    Con posterioridad he tenido que ser hospitalizado, de nuevo, en el mismo centro, hasta en cinco ocasiones. Ídem de lo mismo. Y cada vez lo fue en una planta distinta.
    ACLARO: la administración de ese hospital, La Ribera, de Alzira (Valencia) es privada. El agua y cuidados personales al enfermo, y cualquier atención precisa, sin necesidad de pedirla, la tenía al punto, de día y de noche, festivos incluidos (las Navidades 2010/2011 las pasamos en el hospital). La limpieza (lavado) diaria, en mí estado de postración me era proporcionada con metodicidad cronométrica y con un afecto cuasi familiar.
    Mi esposa me atendió, en la misma habitación, durante cada periodo de hospitalización (seis en total). Las atenciones a mí esposa, idénticas a las mías propias.
    Las atenciones durante las sesiones de quimioterapia, inenarrables.
    En el Hospital Universitario La Fe, de Valencia, cinco años antes, por el tan temido cáncer, atendieron a mí hija mayor. No hace falta insistir en la descripción de los hechos que, como en mí caso posterior, fueron similares, sino mayores.
    En 1998, en el citado Hospital Universitario La Fe, de Valencia, atendieron, hasta su fallecimiento, a mí hermano. Por la misma maldita enfermedad. De nuevo debo insistir en que, las atenciones, fueron de la misma índole, inenarrables.
    Cuando escucho cosas como las de la Sra/Sta Candela pienso (que a veces lo hago) ¿no será que el personaje en cuestión no ha tenido un comportamiento adecuado a su circunstancia? Los empleados de los hospitales lo son por un contrato laboral y, qué duda cabe, porque les gusta la atención a los enfermos. Pero desean ser tratados con la misma deferencia. He visto comportamientos que, personalmente, de ser yo quién hubiera prestado el servicio, ¡NO HUBIERA TOLERADO EN ABSOLUTO! Limpiar la mierda de los enfermos y, encima, aguatar zoquetadas, Sra/Sta Candela..., huy, huy, huy, me huele muy mal lo comentado por usted.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Una narración tan exhaustiva como impecable. De nuevo muchas gracias por los datos que aporta.

      Eliminar
  6. Anónimo21:24


    No voy a comentar lo de esta sra, pues los comentarios anteriores lo han dejado muy claro. Sí comentaré lo que dices sobre el pp y d entrada digo que está en un error.

    El pp da la sensación de ser un partido de maricomplejines avasallados por la izquierda. Pero no es así. En primer lugar hay que entender que no es pp contra psoe, es un solo partido el ppsoe. Por tanto los maricomplejineos no son más que estrategias para que el negocio funcione.

    En cambio, son implacables y feroces cuando se trata de actuar contra alguien que realmente molesta.

    ¿Es que no sabían de sobra la que les iban a montar? ¿por qué no les suprimieron las subvenciones? De todas formas los van a poner a parir, al menos nos ahorramos un dinero. Pero como se trata del ppsoe, los de la zeja son los suyos y todos los insultos lanzados no son más que parte del guión. Un guión malo de una mala película y con unos malos actores.

    Y respecto al cine hagan lo que yo, ni una sola película española, ni siquiera en TV que son gratis. Lo mismo que que los políticos, ni un voto a ninguno.

    Pacococo

    ResponderEliminar
  7. Anónimo22:08

    Las izquierdas en España, como pasa en otras partes de Europa, llevan implícito el resentimiento, la falsedad, y el odio a todo lo que no huela a sus ideas proletarias, esta ideas que en nuestro país nos han hecho tanto daño y tantas muertes han causado en épocas no tan lejanas en la historia. Los artistas se creen abanderados de estas ideas por eso de ser culturalmente progres de dientes para fuera, por que en su interior muchos son unos capitalistas abaros, que incluso llevan a sus mujeres a clínicas exclusivas para millonarios para que nazcan sus hijos en USA, luego se declaran comunistas y presiden manifestaciones defendiendo esto y aquello que en la vida real no comparten, POR QUE, DEL DICHO AL HECHO VA UN GRAN TRECHO. Es lo que veo, CHÁCARAS

    ResponderEliminar
  8. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  9. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  10. Anónimo15:21

    Jajajajajajajaja. Mira el facha pretencioso que escribe abaro con b de buuuurrrrrroooooo. En fin ¡¡¡facha derechista tenía que ser!!!!!.
    Ustedes son unos "avariciosos", pero de estupidez y de burricie.

    ResponderEliminar
  11. Anónimo16:00

    Me encanta como ustedes despellejan a Candela Peña mientras dejan en paz a ciertos chorizos impresentables que provocan vergüenza ajena. Candela Peña como ciudadana tiene derecho a opinar, y ustedes no son nadie para decir que tiene que callarse la boca. Me cabrea que mientras por ahí, hay gente que provoca sonrojo y vergüenza ajena (ya sea Bárcenas, Jesús Sepúlveda...), ustedes jamás se hallan dignado en mencionar a dichos impresentables y sin embargo tengan ustedes la desvergüenza de cebarse con Candela Peña sólo porque no les gusta lo que opina... Sin comentarios. En vez de Red de ciudadanos comprometidos deberían autodenominarse RED DE CIUDADANOS COMPROMETIDOS CON EL PP.

    ResponderEliminar

Comentarios moderados.