sábado, 5 de enero de 2013

Ante todo no conviene olvidar

Ni la una dispone de una barita mágica para encarrilar tanto estropicio como heredó el PP, ni la otra debería recurrir sistemáticamente al reproche demagógico sin meditar previamente lo que hizo su partido durante los anteriores ocho años de gobierno. 
España se encuentra hecha unos zorros, eso está claro. Pero es preciso saber de dónde venimos para, en todo caso, hacernos una idea de que es imposible recuperar en un año lo mucho perdido en la etapa de gobierno más desgraciada que ha padecido nuestra patria: la de ZP. Al respecto paso a este blog lo que escribí en Batiburrillo de Red Liberal hace menos de un año, concretamente el 15 de febrero de 2012. Les animo a leer el artículo, donde se facilitan algunas cifras, porque ante todo no conviene olvidar el origen del desastre actual para evitar la tentación de volver a las andadas: 

Socialismo, la losa de doble faz



Como gobierno, el partido socialista se encargó de demostrarnos durante ochos años que no valía un pimiento. Era lógico. Ese gobierno estaba presidido por un mocetón de 1,85 pero con la mentalidad de un niño de menos de siete años: antojadizo, incompetente, malcriado, irascible, rencoroso, sectario, vengativo y manirroto, muy manirroto. El sujeto, como no podía ser de otro modo, se rodeó de una serie de ministros elegidos de entre lo peor de un partido político de por sí propenso a darle cabida a los vagos, a los torpes y a los arribistas, o a los arribistas torpes aficionados a vivir del erario, que no siempre es lo mismo pero son condiciones complementarias.
Fue tal la ineficacia de esos ministros, que ni buscándolos a propósito en unas oposiciones a escala nacional (¡uy, qué he dicho: nacional!) se hubiera encontrado una cuadrilla tan sólida de pelafustanes. Y claro, así, con semejante "ganao" y la manga ancha que les daba el "mayoral", se dedicaron en cuerpo y alma a lo único que sabían hacer: repartir cuantiosísimas subvenciones entre sus cofrades, sus adictos y sus cejateros. Practicaron el reparto de tal modo que incluso varios días después de haber perdido las elecciones y mientras poseían el BOE solo en usufructo, es decir, con una leyenda de "se mira pero no se toca", repartieron lo ajeno con el mayor de los ahíncos. Para entendernos: En tales circunstancias de interinidad no debe firmarse al pie de los decretos salvo para cuestiones manifiestamente urgentes en las que nunca cabe incluir una subvención a este o aquel grupo de lesbianas.

De hecho, nos habría salido mucho más barato un gobierno al que le hubieran dado una perrillas o una VISA oro a cada uno de sus ministros y encomendado la siguiente tarea: "Coge el dinero y vete de compras a El Corte Inglés, pero, ¡por Dios!, no hagas nada en el Ministerio". No fue así, por desgracia para los españoles, y en cada departamento ministerial nos hemos encontrado con un agujero espantoso: Fomento (José Blanco), 40.000 millones comprometidos y unas cuantas obras interrumpidas por falta de pago a las constructoras. Defensa (Carme Chacón), 32.000 millones de deuda en no se sabe qué. Y lo mismo o más, en proporción al presupuesto manejado, en cada uno del resto de los ministerios. Eso sí, la vicepresidenta económica mintió respecto al déficit incluso el mismo día en que Rajoy fue elegido presidente por el Congreso. ¿No es todo esto una enorme losa que España ha debido soportar durante demasiado tiempo?
Pues bien, la otra faz de la losa es un partido socialista que en la oposición se muestra incapaz de admitir (no interesa recordarlo, Rubalcaba nunca estuvo en el gobierno) que cuanto ahora ocurre es consecuencia de la etapa anterior. Por eso hoy, sin ir más lejos, se ha visto en el Congreso cómo la nueva portavoz socialista, Soraya Rodríguez (entre Sorayas anda el juego) se dirigía a Soraya Sáenz de Santamaría y le soltaba una buena filípica, dando la impresión en su arrebato cargado de frases despectivas que el PSOE fuese un partido fundado en febrero de 2012, y por lo tanto de una breve trayectoria inmaculada en la que le asiste el derecho a reprocharle cualquier cosa al PP, que a juzgar por las palabras de la sociata se diría que Rajoy gobierna desde 1978. Es decir, tenemos a un PP culpable de todo lo malo que rodea esta crisis originada en los tiempos de Aznar. Soraya la pepera, pequeña pero matona, ha tenido fácil la respuesta, entre otras frases oportunas ha citado una cifra: 5.200.000 españoles sin trabajo. En verdad que no hace falta más para advertir que el socialismo es igualmente una losa en la oposición.

13 comentarios:

  1. Es verdad que la herencia recibida por el actual gobierno del anterior socialista es una pesada losa en el momento actual. También lo es que ni el PP en los tiempos de Aznar ni el PSOE en los de Zapatero (el actual de Rajoy tampoco) han tratado de modificar las bases económicas españolas y disminuir la excesiva dependencia del ladrillo y la energía importada.

    Al contrario, tanto uno como otro (y el actual) gobernaron montados en el ladrillo y la especulación con motor económico, con las nefastas consecuencias conocidas. Incluyo a Rajoy: una de las primeras medidas que hizo cuando asumió la presidencia hace un año fue tratar de mejorar el mercado inmobiliario en la misma línea que los anteriores gobiernos. O sea, más de lo mismo.

    Ciertamente, si Zapatero hubiera tomado las cosas en serio y adoptado medidas mucho antes de que lo hizo no se hubiera evitado la crisis tampoco pero el golpe se hubiera amortigüado y ahora las cosas estarían menos crudas.

    Rajoy tiene tela por delante. Salir de semejante embrollo actual en lo social y en lo económico no ocurrirá mañana. Pero a este hombre la falta agilidad, iniciativa, dinamismo, celeridad.

    Al otro, al peor presidente que ha tenido España desde que hay democracia, (o sea, ZP) le sobraba bobería, futilidad, hipocresía y memez. Y se empeñó en tirar piedras sobre su propio tejado impulsando desde el gobierno central iniciativas para modificar estatutos de autonomía, que ya tiene delito la cosa.

    Algo hemos cambiado a mejor con el paso de Zapatero a Rajoy: ya no parecemos tan obsesionados u ofuscados con cuestiones fundamentalísimas para el bienestar español y el progreso económico como la obcecada distinción entre miembro y miembra, practicante y practicante o estudiante y estudianta universitario y universitaria de género y génera. ¡Un respiro, por Dios!

    Sin embargo, en España ni se hizo antes ni se está haciendo ahora nada de lo que realmente se debería hacer: meter decidida y contundente mano a la cuestión de la organización territorial de Estado, o modificar la Ley Electoral, entre otros ejemplos (algo se pretende hacer ahora reduciendo el número de concejales, cosa que en estos momentos está en proyecto).

    Eso por un lado, en lo público. Por otro, en el terreno de lo privado, imponer auténtica disciplina en lo financiero y mercantil, por ejemplo en los pagarés de empresa. ¿Alguien sabe qué se ha hecho al resspecto de los pagarés desde hace años?

    En lugar de eso, se evita coger el toro por los cuernos siendo mucho más fácil reducir sueldo a los funcionarios o, peor aún, actuar al estilo catalán: se apagan luces de hospital los fines de semana y se posponen intervenciones quirúrgicas para ahorrar luz.

    ¡Porca miseria!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un comentario de primera fila que comparto en su totalidad, en el bien entendido de que en ningún momento he pretendido justificar al apocado Rajoy, quien ha mejorado algo a ZP, pero no lo necesario como para adoptar ciertas decisiones de envergadura que serían precisas, algunas de las cuales tú mismo has citado. Un saludo cordial y muchas gracias por unos comentarios a mi juicio tan acertados.

      Eliminar
    2. Acertadísimo comentario con el que estoy al cien por cien de acuerdo. Muchos pensamos igual y cada dia somos más los que nos atrevemos a expresar en voz alta estos puntos de vista.
      Lo lamentable es la constatación de que nuestra "clase política" esta muy por debajo de lo que se requiere para una situación como esta de crisis económica, de valores, institucional,...se necesatarian hombres y mujeres de mucha mas valía personal, pero ¿donde estan?
      Algunos de ellos estan tan llenos de si mismos por haber ganado unas elecciones, que no escuchan a nadie, se creen en posesión de la verdad.
      ¿Qie opinión os merece la iniciativa Bono - Zaplana?
      He recibido alguna critica a mi columna "Navidad laica". ¿Exagero?

      Eliminar
    3. Gracias a tí, Pedro. Además de los citados sin duda hay más asuntos que se deberían atacar desde ya en España, pero no se hace. Son cambios estructurales y de profundidad. No hay ........ para hacerlos.

      Por otro lado, es cierto lo que dice J. Rocha: la falta de líderes con voluntad fuerte, carisma, ideas claras y don de gentes para arraigar la idea (necesaria) de cambios profundos en España, es uno de los problemas que tenemos. Para arrastrar multitudes hacia esa labor es imprescindible una cosa: estar libres de ataduras, pasadas y presentes, con los nacionalismos. No tener las mismas miserias que en ese sentido tienen PP y PSOE. Quizá entre jóvenes generaciones nuevas aparezcan algunas personas así. Por ahora casos como el de Albert Rivera en Cataluña son de alcance limitado.

      Por cierto, esto de los localismos patrios choca con la forma de ver las cosas de la gente que por alguna razón se acostumbró al mar; choca con la gente que ha hecho del mar su vida y también con la gente que, sencillamente, ama el mar y su historia. La mar es la patria más amplia y solidaria que existe, sin fronteras, abierta y generosa, aunque en ocasiones sea cruel. La mar es la única parte del mundo que une a todos los hombres. Por eso, para una persona que ame el mar y que se identifique con lo que representa lo normal es que esto de los localismos minúsculos, siempre estableciendo fronteras con el vecino, o inventándoselas, le causa rechazo.

      No estoy informado de la iniciativa Bono-Zaplana, no puedo opinar, lo siento. En cuanto a "Navidad laica" la he leído y dejaré algún comentario allí, pero respondiendo a la pregunta, creo que no hay exageración alguna en ese escrito. No es problema de exageraciones, lo que pasa es que en los asuntos de la religión y la fe es complicado ser objetivo. Es mi opinión.

      Un saludo.

      Eliminar
    4. Personas como tú, amigo Romero, hacen que este blog aumente de categoría y posea más "decibelios". También Jaime Rocha o Miguel Juan, un trío de excelentes anotadores. Muchas gracias a los tres.

      Eliminar
  2. Estoy de acuerdo con el comentario de Romero Landa.
    Prácticamente en todo y, para no entrar en disquisiciones incomodas, añadiré que, en todo.
    Los puntos que yo añadiría, que creo en la mente de todos, nos obligarían a entrar en esas discusiones de las que huyo pero, si os paráis a pensar, llegareis, espero, a los mismos convencimientos.
    Rajoy no es ese personaje al que muchos votamos. No llega. Le falta ese punto de decisión, de arrojo, que haría falta.
    Y, sobre todo, está obviando cuestiones que no debía dejar de lado. ¿Es que, en España, no quedan líderes que, al frente de un partido fuerte, como es el PP, lleven las cosas a sus rumbos lógicos?
    Personalmente siempre he opinado que, Rajoy, no me gustaba dema-siado pero, como siempre creo que me puedo estar equivocando, le voté con esperando la posibilidad de que, efectivamente, fuera capaz de hacer algo.
    No lo está haciendo y, por tanto, vuelvo a mis principios. NO ME GUS-TABA, NO ME GUSTA Y, PO LO QUE VEO, NO ME GUSTARÁ.
    ¿Hace falta cuestiones como Bolinaga, Cataluña y Más, Andalucía y sus ERES, Impuestos sin mesura, IRPF desmedido, etc, etc, etc?
    Definitivamente, estoy de acuerdo con el señor Romero Landa pero, sin excedernos en la alabanzas a un personaje que, me temo, está siendo una continuidad, en algunos aspectos, del funesto Zapatero (remedo de Largo Caballero, versión siglo XXI).

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Otro excelente comentario que igualmente secundo. De hecho, en este blog hay varios artículos donde he escrito opiniones muy similares. Por ejemplo este: http://batiburrillo2012.blogspot.com.es/2012/10/rajoy-debe-dimitir-por-el-bien-de-espana.html

      Eliminar
    2. Zapatero ha sido remedo, tontolhaba y nefasto, siempre preocupado por sus aídos, aídas y desmemorias históricas. Un sujeto a quien, si le preguntabas por España, te decía que el concepto de nación es discutible pero, en cambio, no dejaba de matizar su total comprensión por las nacionalidades españolas. ¡Tela, amigo Miguel Juan!

      Y es que la cosa está viciada ya desde el principio, es decir, desde la Constitución Española del 78, que tiene párrafos redactados de auténtica pena. Esto de la nacionalidad es uno de los desastres escritos. Fíjate, por ejemplo, en el artículo 2 (Título preliminar): indica que se

      " ... garantiza y reconoce el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones ... "

      Se está definiendo a Cataluña como nacionalidad, lo que es un absurdo de campeonato. La nacionalidad es algo que poseen las personas , no los territorios. Tu nacionalidad, Miguel Juan, es la española. Tu NACION es España. No existe la nacionalidad Francia, sino la nación Francia y sus ciudadanos tienen la nacionalidad francesa. Existe la nación Alemania, pero no la nacionalidad Alemania, sino que los alemanes tienen nacionalidad alemana. ¿Me explico?

      Pues aquí, directamente y nada menos que en la Constitución, se define Cataluña como NACIONALIDAD. Y ya puestos, dado que no se especifica ningún territorio, cualquiera puede pensar que su nacionalidad (que no nación) es León. O Extremadura. O Castilla. ¿Cómo vas a decir que no si resulta que la Constitución te "reconoce el derecho"? Pues nada, maricón el último, los de Granada, por ejemplo, pueden ir más allá de lo políticamente correcto y considerarse como nacionalidad políticamente nazarí.

      Si le hablas en estos términos a un sudamericano es posible que no te entienda porque ellos aplican correctamente el concepto nacionalidad a las personas y no a los territorios. Hay que reconocer que, en muchos casos, hablan mejor que nosotros los españoles.

      Lo de la memoria histórica también tiene miga. Y el ejemplo ha cundido lo bastante como para alimentar a más políticos y hasta tiene hijos avanzados. Por ejemplo, existe en Andalucía un Director General de Memoria Democrática. Sí, sí, como lo lees. Es un tal Luis Gabriel Naranjo (de IU). Y supongo que tendrá sus asesores.

      Por mal que esté España, en direcciones generales de memoria democrática no debemos regatear gastos. Un cargo imprescindible en un Estado moderno, como todo el mundo sabe. Cualquier día nos ilustran: "Llora como un hombre y una mujer lo que no supiste defender como un hombre y una mujer". ¡Reyes Católicos dimisión!

      Sin duda, necesitamos más a gente de esta clase que a historiadores, porque estos últimos son sospechosos (la memoria a secas tiene connotaciones fascistas). Por tanto, es imprescindible la presencia de directores generales de memoria democrática porque la memoria, o es democrática, o no es memoria. Menos mal que están los directores generales de memoria democrática para orientarnos en la materia. Por supuesto, imagino que el ejemplo andaluz habrá cundido y debe haber un director general de esos por cada autonomía. O dos, por lo menos.

      Una de las cosas que deberían hacerse en España es una modificación profunda de la Ley Electoral, amigo Miguel Juan. Reducir no solo el número de chupópteros incrustados en la política sino también la Constitución en los artículos correspondientes para limitar el costosísimo daño que supone el excesivo poder de los nacionalismos patrios.

      Pero, si te parece, para no hacer este comentario más cansino con tanta línea escrita (lo siento, mea culpa), lo dejamos para la siguiente ocasión.

      Eliminar
  3. Ya se sabía que la izquierda no iba a tolerar unas reformas que son indispensables e inevitables para subsistir y que si son tan duras es precisamente por su causa y ahora incendian la calle amenazando la estabilidad necesaria para que den frutos...es cierto que también hay mucho descontento general y es lógico, pero no pueden hacerse tortillas sin romper huevos y haces bien en recordar que apenas llevan un año al timón y lo que hay encima es demasiado, pero por descontado estoy de acuerdo en que hay que acometer las reformas de la Administración y otras cosas apuntadas por los anteriores comentaristas, aunque también señalo que las más importantes y de recorrido para que funcionen han de contar con un consenso amplio y un ambiente de serenidad que ahora mismo no se dan en absoluto sino todo lo contrario lo que lo haría muy peligroso.

    Vamos a ver si se concretan otras reformas que se anuncian y suenan bien como "unidad de mercado" y "liberalizaciones" aparte de la reducción de personal administrativo y ello contribuye a estabilizar algo la nave, aunque resultará difícil porque con los desafíos nazionatas y la irresponsabilidad de la oposición hay que contar,pero hay ciertas señales de la macroeconomía que invitan a un cierto optimismo y no sé por qué hay que ocultarlas como no se hace con lo contrario...lo que se está haciendo es muy difícil porque ya no se puede dar a la maquinita de imprimir billetes

    Un saludazo y feliz año Don Pedro

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Feliz año para ti y todos los tuyos, querida Maribeluca. Y muchas gracias por un comentario que es igualmente muy interesante y complementario de los anteriores, es decir, necesario para confrontar las diversas opiniones que deben llevarnos a la realidad.

      Eliminar
    2. Un comentario muy sensato, Maribeluca.

      Por cierto, mucho gusto.

      Como decía, sensato. Y bienintencionado. Copypego de tu comentario:

      " ... aunque también señalo que las más importantes y de recorrido para que funcionen han de contar con un consenso amplio y un ambiente de serenidad que ahora mismo no se dan ..."

      ¿Ves por qué soy muy pesimista?

      Por un lado, es necesario consenso para hacer algunas cosas. Para esto se precisa amplitud de miras, líderes políticos con sentido de Estado, limpieza de voluntades. Nada de eso veo en nuestros políticos actuales. Estos están aquí para quedarse. ¿Puedo confiar en Bibianas, Rodrigos Ratos, Anasagastis, Urkullus? Amiga mía, yo no. De la misma manera que no veo líderes capacitados, tampoco veo espíritu constructivo o al menos una voluntad que se parezca a aquella de la Transición y de los Pactos de la Moncloa.

      La serenidad, desde luego, no existe ahora. Tampoco tengo esperanzas de que aparezca la suficiente: los nacionalismos nunca van a dejar de centrifugar el Estado y crear tensiones institucionales de todo tipo, incluso a nivel del Tribunal Constitucional y, para no perder la costumbre, incumpliendo sentencias judiciales. Esto no es propio de un Estado serio pero, lamentablemente, es lo que tenemos en España.

      Por eso es imprescindible limitar la influencia en las Cortes de, pongamos por caso, un grupo que con siete diputados y 400.000 votos nacionalistas(por poner una cifra) es quien tiene agarrado por los h.... al gobierno elegido tras unas elección donde obtuvo un respaldo de 150 diputados y 8.000.000 millones de votos (por poner otras cifras orientativas). Ni con mayorías absolutas se acomete el asunto.

      Arreglar eso exige consenso para modificar la Constitución y la Ley Electoral. Compromiso serio, firme, de los partidos que se presentan en todo el territorio nacional, que se comprometan con España antes que en cosignas de partido, donde pueden incluirse desde el PP a IU pasando por PSOE y UPyD. Pero ... ¿esto se ve posible hoy día con los políticos actuales? Sinceramente, no.

      Permíteme que lo repita: soy muy pesimista. Es que hay motivos, no me los invento. Y la culpa la tenemos, también, los electores, que somos los que votamos.

      Un saludo.

      Eliminar
    3. Coincido con usted, señor Romero Landa: la culpa la tenemos también los electores. De hecho, los políticos son el fiel reflejo de quienes los elegimos. Un saludo.

      Eliminar
  4. Clarinete.

    Y mucho gusto también, señor Romero.

    Un saludo a todos y feliz año.

    ResponderEliminar

Comentarios moderados.