Lamentablemente, para algunos musulmanes sus esposas e hijos no cuentan para nada. Sobre todo si son hijas, nada valoradas en el mundo del retrógrado islam. Tal y como se observa en el vídeo, son poco menos que carne de cañón para provocar reacciones desafortunadas de los militares israelíes, que alguna habrá puesto que todo tiene un límite. Esas imágenes que se obtengan, debidamente editadas, pueden servir a los palestinos de nauseabunda propaganda. Y eso sin hablar del uso de sus familiares como parapetos cuando el ejército israelí, usando la legítima defensa, decide castigar a quienes previamente se han hartado de enviar cohetes contra zonas civiles o bien, indiscriminadamente, los han tiroteado a la más mínima ocasión. Por suerte, el pueblo israelí es tan civilizado que, como se advierte en el vídeo, entrena a su ejército para soslayar todo tipo de provocaciones. ¡Cuán distinto sería si fuese al revés!
Esta niña en concreto es hija de una norteamericana, antisemita a ultranza que pone en peligro a sus hijas después de haberlas envenenado. Puede que cuando crezcan le den para el pelo a la mama monstruo esa que tienen.
ResponderEliminarSaluditos.
Supongo que te refieres a que les ha envenenado el cerebro. ¡Pues mira, igual que a los nacionalistas en algunas regiones españolas!
EliminarSí claro, me refería a mental y moralmente hablando. Y sí, es lo mismo que hacen en las ikastolas y los colegios donde prima el nacionalismo y la distorsión mentirosa de la propia historia.
EliminarSaluditos.
Ni más ni menos. Un saludo cordial.
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