En beneficio de España: Rajoy y Sánchez deben dimitir y sus partidos formar un gobierno de coalición (527)

Los dos políticos que aparecen en la imagen se han convertido, como consecuencia del odio que se tienen entre sí y la imposibilidad de entenderse, en sendos estorbos para los intereses de España. Deben dimitir y dar paso en sus partidos a quienes sean capaces de formar una coalición de gobierno que se mantenga estable durante cuatro años. Y de paso que el PSOE, al darle puerta a Sánchez, abandone buena parte de su radicalidad y comience a parecerse a la socialdemocracia europea. 

Tal y como se esperaba, los votantes han puesto en su sitio a dos candidatos que han despertado poco entusiasmo, de un lado Mariano Rajoy, alias "El Quieto" (de 186 diputados ha pasado a 123), a quien el tema de la economía no le ha ido mal, si bien no todo es cuestión de números al haber algo determinante en muchos ciudadanos: valores. Unos valores que incluyen ante todo el derecho a la vida (problema traspasado desde hace cinco años al Constitucional), el patriotismo y la unidad de España, tema éste en el que Rajoy ha recibido unas cuantas bofetadas en Cataluña, donde los nacionalistas han incumplido bastantes sentencias sin que Rajoy moviera una pestaña, logrando allí la miseria de cinco diputados y quedando fatal en votos. Eso sí, el PP conserva la mayoría absoluta en el Senado, lo que de bien poco le vale porque cualquier ley retocada en la alta cámara vuelve a decidirse en el Congreso, una situación que es buena para nada y que a ciertos partidos les motiva a cuestionar la existencia del Senado, ya que si hay que gastar se gasta, pero no para que los senadores se den a la molicie en la piscina y la sauna.

En el caso de Pedro Sánchez, alias "El Matón Rojo" o "ZP 2.0" (que de unos ya escasos 110 diputados del PSOE ha caído a 90), nos las habemos ante un individuo al que alguien le dijo al oído que debía radicalizarse si no quería que "Coleta Morada", profesional del embrollo, se lo comiera por los pies. Y va el tío y no solo se radicaliza en campaña sino que además se auto convence de que debe ser p'a los restos, poniendo de su cosecha una catarata de insultos dirigidos a Rajoy que lo convierte en enemigo irreconciliable (no quiso atender su llamada el día del "fostión" de Pontevedra), que es lo último que debe hacer (crearse enemigos eternos) cualquiera que aspire a gobernar algún día y tenga dos dedos de frente, lo que no es el caso de Perico "El Largo", un tipo que tiene tanto de cortito mental como Rajoy de quieto.

Ahora bien, tal y como han quedado los resultados, calificados en varios medios como de España ingobernable, parece que solamente exista una opción, que el PSOE liderado por Sánchez forme gobierno en coalición con Podemos y el resto de esa caterva de partidillos antisistema, antidemocráticos y antiespañoles, en cuyo caso se darán dos circunstancias a cual peor: 1.- "Coleta Morada", mucho más despierto y encanallado que el sociata, manipulará a su antojo y en todo momento esa coalición, lo que llevará a España al paradigma de la miseria venezolana. 2.- Las formaciones separatistas, sobre todo esa ERC de Rufián y Tardà (no soy capaz de concebir un tándem más radical, desagradable y pendenciero), volverán a chantajear al gobierno casi del mismo modo en que lo han venido haciendo desde hace 38 años y cada vez que el partido en el poder no ha dispuesto de mayoría absoluta.

Y esa situación de multipartito en el poder, cuyas ideologías oscilan entre lo radical y lo muy radical (las mareas moradas son ya un  'puñao' de grupos a cual más sectario), creará tanta inestabilidad y desconfianza, advertida de inmediato en Europa y los mercados financieros, que nadie va a ofrecerle un duro al gobierno de España si no es a cambio de un brazo o una pierna. Situación que puede hacernos retroceder más de una década en nuestro nivel de vida y bienestar, porque cuando los totalitarios morados y otras hierbas similares asaltan el poder (tomemos el ejemplo de Venezuela), cuesta una generación entera quitárselos de encima: Debe morirse el jefe, dejar multimillonarias a sus hijas con todo lo rapiñado en los innumerables actos de corrupción y convertir en potentados a unos cuantos altos cargos militares, que por supuesto se enriquecerán a base de beneficios irregulares con el narcotráfico y demás violaciones de la legalidad.

Ante una situación de semejante calado, sumamente perjudicial para España y los españoles, a mi juicio solamente cabe lo que se conoce como "Gran Calición" entre el PP y el PSOE, lo que ocurre es que al haberse declarado odio eterno los actuales jefes de esos partidos no parece que exista el ambiente adecuado para que ambos formen gobierno: Es imposible trabajar codo con codo durante cuatro años con alguien a quien odias de ese modo. Sin embargo, lo que sientan Rajoy y Sánchez entre sí es algo que a los que amamos a España por encima de todo debe importarnos un pepino, de ahí que la propuesta más lógica sea pedirles a estos dos pájaros que dimitan, convoquen ambas formaciones un congreso extraordinario para elegir a sus nuevos jefes y que luego, valorando ante todo el interés de España, acuerden un gobierno de coalición para cuatro años. Ah, y que mientras tanto le vayan dando dos duros a "Coleta Morada", que ayer salió sacando pecho y decidió largar como si hubiese sido él quien ganara las elecciones por mayoría absoluta. ¡Animalico!