"Rocroi. El último tercio", uno de los cuadros más emblemáticos del gran pintor catalán Augusto Ferrer-Dalmau (Barcelona 1964) |
Hace pocos días, un lector de Batiburrillo afirmó que
no conocía a nadie que se hubiera marchado de Cataluña, y añadía: "aparte de todos
aquellos jubilados del resto de España que quisieron o quieren acabar sus días
en su tierra". Como además opinaba sobre otros temas, le contesté con un artículo completo y le ofrecí el nombre de cuatro personajes que por diversas razones
políticas fueron expulsados de Cataluña. Bien, pues hoy traigo a este blog un quinto personaje, igualmente de primera fila,
al que su profesión le ha llevado a conocer un mínimo la Historia de España y al
que entrevistan en La Gaceta. A la pregunta ¿cuándo volverá a su tierra? ofrece
la respuesta siguiente: "Quan retorni
el seny catalá". Una respuesta clara que argumenta a fondo a lo largo
de la entrevista que seguidamente les ofrezco.
Veamos en primer lugar de
quien se trata:
Augusto Ferrer-Dalmau Nieto (Barcelona, 1964) es uno
de los pintores de mayor proyección, tanto en España como en otros muchos países.
Su heterogénea obra, ahora centrada en la temática ecuestre militar, se ha
convertido en un referente indiscutible a nivel mundial. A lo largo de su
trayectoria profesional ha realizado exitosas exposiciones en Madrid, Londres,
Paris y Nueva York. De su primera etapa paisajística nacieron decenas de óleos
que han servido como referente en media docena de libros de arte a nivel
universal. Su actual pintura, la militar, está usándose también para ilustrar
decenas de libros, monografías y revistas, especialmente de historia. Su obra
puede contemplarse en museos, especialmente de ámbito militar, por lo que pueden
encontrarse algunos de sus cuadros el Museo de la Guardia Real, Museos de los
regimientos Farnesio, Lusitania, Numancia, Montesa, Alcántara, Asturias y por
supuesto el Museo Histórico Militar.
Y a continuación puede leer
completa la entrevista a cargo de Kiko Méndez-Monasterio:
Pintor del
exilio catalán, heredero de Cusachs y el más cotizado representante de la
pintura militar de hoy. Hay arte con
función terapéutica, que aporta algo de amor propio a un paciente
necesitadísimo de autoestima. Este parece el empeño de Augusto
Ferrer-Dalmau, pintor del exilio catalán, heredero de Cusachs y el más cotizado
representante de la pintura militar de hoy.
Pasearse entre
los lanceros, húsares y cazadores que se asoman desde sus lienzos es una
sensación parecida a la que experimenta el protagonista de Las cuatro plumas cuando
atraviesa la galería donde se hayan los antepasados heroicos de su familia,
temiendo no ser digno de heredar tantas hazañas.
El talento de Dalmau
consiste en explicarnos esa admiración inevitable hacia lo militar, el encuentro de la
elegancia y la humanidad en lo castrense, el fondo sensible que es compatible
con la empuñadura del sable, quizá porque dentro
de todos nosotros anida la esperanza de que la violencia tenga reglas,
procedimientos y uniformes; ejércitos, en fin, que nos separen de la barbarie y
lo salvaje. Pero hoy no preguntamos a Dalmau por sus pinturas, sino por cómo
afecta a un artista catalán el debate permanente sobre su tierra. Tan de
moda el sentimiento independentista, él también habla de lo que siente: "Amo a España y a la tierra que me vio
nacer. Siento un gran orgullo de ser catalán y español".
-Y
entonces, ¿por qué tuvo que abandonar Barcelona?
-No estaba
cómodo. El ambiente cultural y social que se respira es asfixiante. A mí me
creaba un estado de crispación permanente. El tripartito dilapidó el buen
nombre de Cataluña, creando enfrentamiento y discordia donde nunca la hubo, y
lo peor es que los que están ahora siguen con la misma cantinela, o peor.
-O sea, que se
sentía casi perseguido en su propia ciudad.
-No, no tanto.
Yo no creo que haya una persecución, lo que hay es una discriminación sibilina,
una sibilina censura y, en algunos entornos, desprecio a todo lo que huela a
español.
-Pues los nacionalistas hablan de que artistas e
intelectuales participan de su proyecto. ¿Qué ha hecho el nacionalismo por la
cultura en Cataluña?
-¡Mentir! Sin
ningún tipo de vergüenza ni de dignidad. Manipular la historia y la cultura
para servir a sus fines, hacer creer al pueblo una identidad cultural
inventada, de un catalanismo excluyente, sin ningún tipo de arraigo con el
resto de España.
-Y eso ¿cómo afecta a la vida diaria? ¿Existe una fractura
en la sociedad catalana o todo es un debate político que no se traslada a la
calle?
-Hay una
fractura, claro que la hay. Existe una gran mayoría silenciosa que quiere
formar parte de España y otra menor apoyada por los medios. Y la fractura es
cada día más encarnizada. Patrocinada sobre todo por aquellos que se creen con
el derecho de hablar en nombre de todos los catalanes, escupiendo mentiras y
creando malestar en los debates ¿Quién se creen que son?
-¿Cómo sería
posible cambiar el rumbo y avanzar hacia la reconciliación?
-La
reconciliación pasa por dejar de mentir y manipular, pero el nacionalismo es el
gran 'negoci' de Cataluña y dudo mucho que esta casta, por llamarlos de alguna
manera, quieran renunciar al poder y a sus privilegios.
-El 12-0 hubo una manifestación en la Plaza de Cataluña
para defender la españolidad del territorio...
-Un gran
éxito, sin duda. Pero el pueblo catalán ya se ha manifestado en cierto modo y
ha demostrado cual es el sentimiento general cuando no está de por medio la
política. No hay más que recordar la victoria de España en el Mundial de
fútbol: todas las calles de Cataluña se inundaron de banderas de España y se
hizo patente un natural orgullo de ser español. Eso superó con creces cualquier
manifestación independentista presente y futura. De verdad, por ser un
sentimiento tan despolitizado, tan espontáneo... Yo vi que esos días el
nacionalismo se tambaleaba.
-Ha dicho Vidal-Quadras que si se produce la convocatoria
de un referéndum ilegal habría de mandar a un general de la Guardia Civil para
que aplicase la Constitución. Por cierto, a usted la Guardia Civil le ha
condecorado hace bien poco...
-Las leyes
están para que se cumplan. Punto. Las fuerzas de seguridad del estado están
para salvaguardar nuestros derechos y que se haga cumplir la ley. La
Constitución Española es muy clara al respecto…
-¿Usted se empadronaría de nuevo en Barcelona para poder
votar en ese referéndum?
-No, no, no.
Nunca me prestaría a esa pantomima. Miles y miles de catalanes a lo largo de la
historia han trabajado, han luchado, han dado sus vidas por un proyecto común
llamado España. Habría que preguntarles a todos ellos también.
-¿Cómo sería
el cuadro de una Cataluña independiente?
-Arruinada, rencorosa y tremendamente
triste…
-Haga de
profeta,¿cómo acabará todo esto?
-Las nuevas
tecnologías están en contra de nacionalismos y fronteras. Internet es
demoledor, el inglés y el español son lenguajes universales en la red. Muy
pocos navegan por ella en catalán. Las noticias se pueden contrastar en
infinidad de diarios digitales, por eso es más difícil engañar. Cuantos más
canales, más pluralidad y menos monopolio. Los Reinos de Taifas tienen sus días
contados.
-Entonces,
¿cuándo volverá a su tierra?
-Quan retorni el
seny catalá.
Vea a continuación el vídeo que refleja una pequeña parte
de la impresionante obra del gran pintor catalán:
Ojalá sea profético.
ResponderEliminarDios te oiga.
EliminarCataluña va en retroceso, no tanto por los nazimbéciles, que sólo eran un movimiento residual al principio de la Democracia cómo de todos los palurdos que, desde los gobiernos de Madrid y la primera línea de votación, los auparon, revitalizaron y suministraron la savia vital en forma de generosas subvenciones para que volvieran con la misma matraca de hace ochenta años.
ResponderEliminarEl pueblo que olvida su historia está claramente condenado a repetirla.
Un saludazo.
Fíjate si se ve venir el retroceso de Cataluña, más entrampada con diferencia que ninguna comunidad, que el gran banco suizo UBS ha comentado: “Dónde se ubicaría Cataluña” financieramente hablando. “En Europa parece que no. Estaría fuera de la UE y de la Eurozona”. “Sería desastroso. La quiebra, la salida de los bancos y una fuerte caída de la riqueza y de los ingresos serían muy probables”.
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