Como al final se
le ocurra a Pedro Sánchez formar un gobierno con los comunistas de Podemos, dándoles
tres ministerios que manejan un alto presupuesto y que solo ellos controlen, como
pretenden, entonces tendré claro que España, y todavía más su Gobierno, y por
ende su presidente, se convertirán en el socio apestado de Europa. No digamos
nada si Interior o el CNI acaban en manos comunistas, ¡Dios nos libre, porque entonces habrá terminado la democracia y la libertad!
En todo caso, cuanto
se inicie el derroche social-podemita de unos recursos que superarán en mucho
cualquier presupuesto además de incrementar el déficit fijado por
la U.E, y de paso comience la extorsión fiscal de las empresas y los particulares, es
decir, de todo quisque, la economía española caerá en picado y el desempleo
volverá al “esplendor” propio de todo régimen izquierdista. Que parece
imposible que en tal aspecto nunca aprendan. ¡Que tontería he puesto, si
aprendieran ya no serían social-comunistas, serían normales!
Y una situación como
la descrita (aquí hago un paréntesis para resaltar que me gustaría equivocarme
en todo) nos puede llevar a los españoles, cuando se intensifique de nuevo la
emigración a nuestro continente y debamos competir en el puesto de trabajo incluso
con emigrantes extracomunitarios, a ser considerados otra vez los apestados
de Europa. La pregunta sería, ¿tan egoístas son los votantes de la izquierda
que con tal de lograr plaza en unos chiringuitos creados exprofeso para
alojarlos a ellos no les importa que la totalidad de España acabe en el guano?
Por muchas vueltas que le de a mi caja de pensar no habría podido expresar el problema que aqueja a España y por ende a los españoles ni siquiera igual que lo comentado anteriormente, solo añadir una vez más que la sociedad Española tiene una enfermedad prácticamente incurable.
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